«Si bebes, no conduzcas». El famoso eslogan con el que la DGT (Dirección General de Tráfico) consiguió en 1985 su primer éxito mediático también se debe hacer ahora extensivo a los nuevos vehículos de movilidad personal (VMP), incluidos los patinetes eléctricos, aunque parezca que algunos no lo tienen muy claro. La Policía Local de Santa Cruz de Tenerife interceptó el pasado miércoles a un ciudadano de 30 años que conducía un patinete por las calles de la capital chicharrera de manera «anómala». Los agentes descubrieron que este conducía el citado vehículo bajos los efectos del alcohol.

Según informa la Policía Local chicharrera en su Twitter, los efectivos que detectaron a este individuo se encontraban realizando «controles selectivos sobre el respeto a las medidas de circulación para los vehículos de movilidad personal en el centro de la ciudad». Estos interceptaron a dicho ciudadano porque conducía el patinete de forma extraña, por lo que procedieron a solicitarle la documentación y a realizarle una prueba de alcoholemia.

Efectivamente, el hombre de 30 años dio positivo con una tasa de 0,91 mg/l. Los agentes de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife le retiraron el vehículo y procedieron a tramitar la correspondiente denuncia.

En varias ocasiones, tanto el alcalde, José Manuel Bermúdez, como la edil de Seguridad Ciudadana, Evelyn Alonso, de Cs, han advertido que el Ayuntamiento, a través de la Policía Local, será «implacable» contra el uso indebido de los patinetes eléctricos en la ciudad. Han indicado que se ha intensificado la vigilancia y que los agentes multarán a todo aquel, ya sea particulares o empresas, que incumplan las normas establecidas para la circulación y estacionamiento de estos vehículos.

En este sentido, desde junio de 2021 hasta la primera semana de enero del presente año, la Policía Local ha interpuesto 306 multas por el uso indebido de los patinetes. Durante dicho periodo, han sido retirados y trasladados al depósito municipal 171 patinetes.