El fuego arrasa en Tenerife más de 110 hectáreas y se descarta que se estabilice en las próximas horas. Así lo ha informado el consejero regional de Presidencia, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, quien ha añadido que a pesar de que las cifras puedan apuntar a un incendio leve, preocupa la combinación meteorológica que obliga a "prestar la máxima atención y a extremar las precauciones".
De hecho, se prevé que a lo largo de las próximas horas aumente la superficie afectada por las llamas, por lo que los equipos de extinción se mantendrán durante la noche, siempre y cuando las condiciones lo permitan.
Hasta el momento, el perímetro del incendio ronda los cinco kilómetros entre los municipios de Los Realejos y San Juan de la Rambla, este último donde se está concentrando el primer gran frente de la lucha contra el fuego.
Es precisamente en esa localidad donde se han producido los primeros desalojos: 31 vecinos según Julio Pérez han sido evacuados de sus viviendas "sin que haya tenido que habilitarse un lugar para alojarlos".
El consejero de Seguridad indicó que las llamas "se mantienen relativamente alejadas de la población" y que estas evacuaciones se producen de manera preventiva. De la misma manera, la precacuión es el argumento esgrimido por el consejero regional para justificar la prohibición de actividades de ocio en áreas forestales y recreativas de todos los municipios que se encuentran entre Santa Úrsula e Icod de Los Vinos "aunque no se prevé la llegada inminente del fuego a estas localidades".
La preocupación está, tal y como coincidieron en señalar tanto Pérez como el presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, en las condiciones climatológicas que no aventuran un fácil control del fuego. Temperaturas altas, baja humedad relativa y algo de viento "molestan" a la hora de sofocar el incendio.
A ello se suma que la zona en la que se ha declarado el fuego es una de las que ha registrado "algunos de los peores incendios de Tenerife", segúhn recordó el consejero regional quien, tal y como hiciera Martín en la mañana de hoy, es uno de los motivos que han llevado a las instituciones a "emplear todos los medios disponibles" en las tareas de extinción desde que se declarase el conato poco después de las diez de la mañana.
Medios
El presidente insular recordó que "lo que era un conato al principio, se produjo en una zona con graves antecedentes y con material en abundacia para alimentar el incendio", por lo que desde primera hora "el objetivo fue atacar con todo el incendio".
"Se tomó la decisión de tener los efectivos correspondientes a un nivel 2 aunque gestionados por el Cabildo", dijo Martín quien incidió en que unas horas más tarde "por el avance del fuego y con un radio de acción cada vez más amplió" se apostó por pasar de nivel. "No se trataba de que empezara a afectar a la población pero sí necesitabamos tener más personal en tierra y al pasar al nivel 2 se pudo incorporar la UME".
Así, se han sumado hasta diez medios áreos entre medios de Tenerife, La Gomera, La Palma y el Gobierno de Canarias y participan en el dispositivo alrededor de 230 efectivos, de los que 150 se dedican directamente a la lucha contra las llamas.
"Afrontar una emergencia requiere de la suma de esfuerzo por parte de todas las administraciones y ha sido así desde las diez de la mañana", aseguró Julio Pérez quien reiteró que también se ha solicitado al Gobierno de España que envíe un hidroavión para colaborar en las tareas de extinción.
El consejero y el presidente insular coincidieron en que "es difícil" que el Ejecutivo estatal atienda esta petición de manera inmediata, teniendo en cuenta que los dispositivos están comprometidos en la atención a los numerosos incendios que asolan el país "y que afectan a más de 10.000 hectáreas", dijo Pérez.
Mientras, Pedro Martín dijo "seguir a la espera" de que se pueda enviar al menos un hidroavión pero confió en que "el número de medios propios y la mejora de las condiciones climatológicas mañana permitan una previsión más favorable".
