La detención de Jesús Alejandro Ramírez Valencia, el presunto sicario colombiano que fue detenido el viernes 29 de abril en el barrio lanzaroteño de Argana Alta, fue grabada por un equipo del programa Fugitivos del canal #0 de Movistar. Pocos minutos después del arresto, éste pedía a la propia Policía Nacional y a la Policía Colombiana que no le devolvieran a su país. «Si vuelvo, me matan», decía a los agentes.

«Puedo colaborar con todo lo que ustedes me pidan. Lo único que yo quiero es no volver a allá, porque allá me matan si yo vuelvo», señaló Ramírez Valencia, de 30 años, que se encontraba en su domicilio junto a su novia y un amigo. El reportaje recoge cómo los policías preparan ya desde Madrid la intervención y cuando tiran abajo la puerta de la casa terrera en la que residía. 

El presunto sicario se muestra nervioso en todo momento. A preguntas de los policías, responde que había huido a Lanzarote para pedir asilo porque en su país su vida corre peligro. «Me están amenazando. Mataron a mi tío. Están extorsionando a mi padre», declara frente a las cámaras.

Uno de los agentes encargados de la investigación apuntó que estos sicarios se encuentran bajo la espada de Damocles, porque son buscados tanto por la policía como por los miembros de otras mafias que quieren asesinarlos por venganza. «Lo mejor que le podía pasar a esta gente es que le coja la policía», dice. No obstante, ese es el argumento al que se acoge el abogado de Jesús Alejandro Ramírez Valencia para evitar su extradición.

El programa Fugitivos de Movistar Plus+ es un formato que mezcla los géneros thriller, documental, factual y true crime) y muestra el trabajo que desempeñan los miembros del Grupo de Localización de Fugitivos de la Policía Nacional, según explicó la plataforma de televisión. Entre los diferentes capítulos se encuentra el del sicario colombiano, el único rodado en el Archipiélago de la primera temporada.