Un meteoro de entre 10 y 45 centímetros provoca un estruendo y alarma a la población de Gran Canaria

Un enorme estruendo alarmó a las 15.38 horas de este miércoles 30 de noviembre a gran parte de Gran Canaria. La entrada en la atmósfera de un meteoro del tamaño de un balón de baloncesto que había recorrido los cielos de La Palma, La Gomera y Tenerife entró en la superficie al norte de Gran Canaria hasta, supuestamente, impactar en el agua al norte de esta última isla, generando una onda acústica que escucharon miles de personas. El Instituto Astrofísico de Canarias (IAC) apunta a un objeto interplanetario de entre 10 y 45 centímetros como causa del fuerte ruido gracias a la descripción dada por los testigos, que incidieron en una luz roja y verde. «Las geminadas son verdosas, algunas tienen colores rojizos; eso es típico de material interplanetario, en este caso, de un meteoro», indicó el doctor en Astronomía Miquel Serra-Ricart.

El impacto, seco, llegó del cielo encapotado que a esa hora reinaba en la Isla. Apenas pasaron unos segundos hasta que el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 comenzó a recibir decenas de llamadas de personas que alertaban de una fuerte explosión, sin determinar en ningún momento la causa de la misma. «No hay incidencias», indicaba una portavoz de la sala de emergencias que, agregaba, sí que se había producido un incremento de las llamadas procedentes de ese enorme estruendo, más de 40, en su mayoría desde Gran Canaria. Hubo tres que, en cambio, se habían recibido desde fuera de la Isla y que, a la postre, serían las que iban a dar una información valiosa para esclarecer lo ocurrido. 

Descartado el avión y el terremoto

Los primeros indicios apuntaban a la posible presencia de un caza militar que habría roto la barrera del sonido y, con ello, provocado ese golpe seco sobre el cielo. Fuentes del ministerio de Defensa y del Mando Aéreo Canario (Macan), sin embargo, desmintieron que hubiera incidencia alguna con los aviones. «No ha habido ningún vuelo o ejercicio militar que haya podido provocar ese estruendo», informaba una de las fuentes. Desde AENA tampoco tenían registrado ningún aviso de que sobre los cielos del Archipiélago se hubiera producido alguna anomalía que derivara en la explosión.

La segunda de las hipótesis que con el paso de las horas se fue desvaneciendo era el de un terremoto. Las estaciones sísmicas que tanto el Instituto Geográfico Nacional (IGN) como el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) tienen en Gran Canaria detectaron el estruendo. Itahiza Domínguez, sismólogo del IGN, descartaba el origen sísmico. «El gran estruendo de esta tarde en Gran Canaria no fue producido por ningún terremoto», escribía en sus redes sociales, para añadir que las estaciones recogieron «el ruido de algún tipo de explosión desconocida». 

En Involcán el mensaje fue similar. «El análisis preliminar de los sismogramas evidencia una forma compatible con una N-wave , una señal producida por el impacto en la superficie terrestre de una onda de choque causada por un objeto, natural o artificial, moviéndose en la atmósfera a velocidad supersónica», explicaba el instituto en sus redes sociales. Las hipótesis que mantenía el Involcan se situaban entre un ‘bólido’, como lo denominó, que habría entrado en la Tierra o un avión supersónico.

Desde La Palma, La Gomera y Tenerife

La información que iba a decantar la balanza hacia el meteoro procedente del espacio eran las tres llamadas desde diferentes islas que había recibido la sala de emergencias del 112. Estas procedían de Los Llanos de Aridane (La Palma), San Sebastián de La Gomera y las cercanías del aeropuerto Tenerife Sur, donde el cielo estaba más despejado. Todas ellas coincidían en señalar que habían vislumbrado un rayo de luz y una estela de humo a lo lejos. Y añadían más detalles: tenían colores rojo y verde. Con todos esos datos, desde el IAC se apuntó a la entrada de un meteoro.

El doctor en Astronomía Miquel Serra-Ricart explicaba: “Prácticamente estamos seguros de que fue un meteoro porque parece que hay gente que vio colores verdes y rojos”. Y explicaba que el estruendo ya en la atmósfera se produjo «debido a la gran velocidad que tiene la roca y a las ondas de presión que genera mientras va entrando porque ha llegado a la superficie terrestre. Si no llega a la superficie terrestre, no debería oírse».

¿Qué tamaño tendría para ser visible durante el día y sobre todo para provocar ese ruido?

 «Es muy difícil determinar el tamaño porque no sabemos exactamente su brillo, pero como se ha visto de día y ha causado ese estruendo, parece que podría tener el tamaño de una pelota de baloncesto, quizás un poco más. Es difícil estimarlo, entre 10 y 45 centímetros. Pero a lo mejor, si tuviésemos una imagen, se podría calcular con más precisión».

El IAC añadía que iba a ser difícil confirmar al cien por cien que se trataba de un meteoro porque tanto sus cámaras como sus telescopios trabajan de noche y carecen de visión para detectar el meteoro de día. Desde el Centro Especial de Canarias del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) situado en Maspalomas, su director, Álvaro Villalobo, precisaba que los satélites no detectaron ninguna anomalía en el momento en que se registró el estruendo.

Un meteorito ha caído al mar

El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, aportaba por la noche lo que ya se intuía: «Las primeras investigaciones apuntan a un meteorito que ha sobrevolado las Islas». Y añadía información nueva relativa al lugar donde podría haber caída el meteoro, que, señalaba, “ha podido impactar en el mar al norte” de Gran Canaria. El presidente, quien resaltaba que no hubo daños personales ni materiales, llamaba a la «calma» ante este nuevo y anómalo incidente.

Las redes no tardaron en llenarse de memes alusivos a la mala suerte de Ángel Víctor Torres durante su presidencia, en la que ha pasado de todo, desde una pandemia hasta la caída de un meteorito. "Ya solo falta la plaga de langostas", apuntan.

Nueve municipios que escucharon la explosión

En nueve municipios de Gran Canaria se escuchó este miércoles por la tarde el estruendo al, presuntamente, entrar un meteoro en la atmósfera y caer al mar al norte de Gran Canaria. Si bien en Los Llanos de Aridane (La Palma), San Sebastián de La Gomera y en las proximidades del aeropuerto de Tenerife Sur pudieron observar el paso de un material parecido a una estrella fugaz, con una fuerte luz, humo y con colores rojo y verde gracias a que el cielo estaba despegado, en Gran Canaria sus habitantes sólo pudieron escuchar la explosión debido a las nubes que predominaban en ese momento.

Las más de 40 llamadas que recibió el 112 procedían de Artenara, Teror, Santa Brígida, Moya, Arucas, Gáldar, Las Palmas de Gran Canaria, Tunte e Ingenio en las que se indicaba que habían escuchado el enorme estruendo. Tanto el 112 como el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, resaltaron que no afectados ni tampoco daños materiales.

Un segundo bólido

El de la tarde del miércoles con estruendo incluido no sería el único episodio de visitas del espacio que se vivió en Canarias. Por la noche, desde Lanzarote fue avistado un segundo bólido. Esta vez se pudo ver claramente porque era de noche y fue más fácil de captar para los observadores del cielo y telescopios.