Siete detenidos en dos operaciones contra el tráfico de droga en Canarias

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a siete personas en dos operaciones contra el tráfico y trapicheo de sustancias estupefacientes en Canarias en las últimas semanas. El primer dispositivo –ejecutado por la Policía Local de Mogán– terminó con dos arrestados en la zona de Arguineguín el 5 de enero; el otro, de la Policía Nacional, permitió desarticular un clan dedicado a la venta de droga en San Cristóbal de La Laguna (Tenerife).

La Policía Local de Mogán detuvo la madrugada del 5 de enero en Arguineguín a un hombre que portaba hachís y cocaína, así como 395 euros fraccionados en varios billetes. Antes de ser interceptado, el individuo iba de acompañante en un vehículo cuyo conductor no tenía carné en vigor. Este fue detenido por un presunto delito contra la seguridad vial.

Los hechos –informó ayer el Ayuntamiento– ocurrieron a las cuatro de la madrugada, cuando un vehículo al percatarse de la presencia policial empezó a actuar de manera sospechosa intentando evadir a los agentes y yendo de la calle Miguel Marrero Rodríguez a otra sin salida, la calle Pedro Perdomo, donde finalmente fue interceptado.

Fue entonces cuando el copiloto bajó del coche e intentó huir a pie, sin éxito. En el cacheo se le encontraron cinco envoltorios de hachís y 395 euros en billetes de 50,20,10 y 5 euros. Tras ser trasladado a dependencias policiales, se llevó a cabo un registro corporal en el que descubrieron que portaba en su ropa interior otros cinco envoltorios, en este caso de cocaína. Finalmente, fue detenido por un delito contra la salud pública y conducido hasta el Puesto Principal de la Guardia Civil de Puerto Rico.

Por su parte, tras realizar la correspondiente consulta en la base de datos de la Dirección General de Tráfico, comprobaron que el conductor del vehículo no tiene permiso de conducir, por lo que fue detenido.

La otra operación tuvo lugar en Tenerife, en la zona de Taco de San Cristóbal de La Laguna. La Policía Nacional desmanteló un punto activo de venta de droga que culminó con la detención de cinco personas pertenecientes a un clan familiar.

Este operaba de manera estructurada, cambiando constantemente los roles de sus miembros para dificultar la labor policial. Los investigados se dedicaban a la venta de cocaína, hachís y crack, y sus principales clientes eran personas jóvenes, menores de 25 años, y personas con problemas de drogadicción.

En el operativo se incautaron 58,25 gramos de cocaína, 13 gramos de crack, 773,51 gramos de hachís y 1.170 euros en efectivo, arma blanca y defensa de goma tipo policial.