Tres años de cárcel para un hombre por hacer tocamientos a una menor en San Bartolomé de Tirajana

Un hombre será condenado a tres años de cárcel en próximas fechas por hacer tocamientos a una menor en un apartamento vacacional en San Bartolomé de Tirajana, Gran Canaria. Es el acuerdo al que llegaron las partes en el juicio celebrado este miércoles en la Audiencia Provincial de Las Palmas, después de reconocer el acusado los hechos que se le imputaban y aceptar la petición de pena del Ministerio Fiscal, a la que se adhirieron la acusación particular y la defensa.

Durante la vista, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, la Fiscalía modificó las conclusiones provisionales que había redactado para añadir la atenuante muy cualificada de la reparación del daño. Esto es así porque el acusado ingresó en la cuenta bancaria de los juzgados los 30.000 euros que el Ministerio Público solicitaba en concepto de responsabilidad civil, tal y como establece el Código Penal. De esta manera, rebajó la petición de condena hasta los tres años de prisión por un delito de agresión sexual a menores de 16 años, lo que supone cuatro años menos que los que interesaba en un primer momento. Tanto la acusación particular como la defensa se adhirieron a esta calificación.

Se aprovechó de la confianza de la familia

La agresión sexual se cometió en una noche de agosto de 2020, mientras el acusado y la víctima se hospedaban en un apartamento del Sur grancanario junto con la familia de la menor, con quienes mantenía una relación de amistad, por lo que existía cierta confianza. El hombre se introdujo en la habitación en la que dormía la adolescente, de 14 años, y le manoseó el pecho, los muslos y sus órganos genitales, aprovechando que esta se encontraba dormida.

Fue un acto que repitió en varias ocasiones durante esa madrugada. De hecho, en una de las ocasiones el procesado sujetó con fuerza las piernas de la joven, a quien inmovilizó para seguir realizándole tocamientos en sus órganos genitales al tiempo que frotaba su miembro contra el cuerpo de la víctima. Todo ello sin que esta tuviera la menor oportunidad de moverse para evadirse del ataque.

Secuelas psicológicas

Este episodio generó en la menor una "huella psíquica consistente en un trastorno de estrés postraumático asociado a síntomas depresivos y ansiógenos", según un resumen del informe psicológico que la Fiscalía destacó en su escrito de acusación. Hasta el punto de que la menor ha experimentado ideas para autolesionarse.

El acusado se mostró conforme con los hechos que se le imputaban, con la pena que solicitaba la Fiscalía y mostró su arrepentimiento por los hechos que había cometido. Tras mostrar las partes su conformidad, el tribunal avanzó que se dictará sentencia en los términos acordados en próximas fechas.