Julián Sánchez Melgar reclama un delito específico para las violaciones grupales

Julián Sánchez Melgar, magistrado de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, ha reclamado a las instituciones españolas que legislen un delito específico para juzgar las violaciones grupales, de forma que dejen de estar contempladas como un agravante más en los casos de agresiones sexuales. Esta medida permitiría, a su parecer, frenar una tendencia "preocupante" que se está trasladando a las nuevas generaciones. "Hemos llegado a ver a niños de doce años implicados en este tipo de delitos", advirtió este viernes en el Aula de Piedra de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), en el marco de unas jornadas educativas sobre los delitos contra la libertad sexual.

El magistrado ejercía como Fiscal General del Estado cuando salió a la luz el caso de La Manada que, por su trascendencia y por las reacciones que generó, marcó un punto de inflexión en las violaciones grupales. "Este caso presentaba una de las características comunes en este tipo de agresiones y es que los acusados grabaron y difundieron los hechos a través de las redes sociales", explicó en su ponencia.

Cuando la Audiencia de Navarra calificó estos hechos como un "abuso sexual", se despertó un fuerte rechazo social, que dejó su huella en la sede de la Fiscalía. "Teníamos la opción de recurrir la sentencia y así lo hicimos porque veíamos indicios claros de que había una intimidación en el delito. En ese momento ya se podía ver que marcaría un antes y un después. Y así fue", relató Sánchez Melgar. El Tribunal Supremo confirmó sus sospechas y corrigió una condena de nueve a quince años por un delito continuado de agresión sexual.

"Lo preocupante es que lo vemos cada día, con una frecuencia intolerable, y baja el perfil del agresor"

"Lo preocupante ahora es que lo vemos cada día, con una frecuencia intolerable, y baja cada vez más el perfil del agresor", expuso el magistrado. El último ejemplo llegó esta misma semana, con una violación grupal en Valencia que denunció una mujer de 18 años y por la que han sido detenidos tres hombres, de entre 25 y 28 años.

El 'modus operandi' más habitual de estos agresores consiste en unirse en un grupo de amigos, que quedan con la víctima, le conducen a un lugar apartado o alejado y realizan los actos de carácter sexual sin consentimiento. "Surgen casi de repente, sin planificación. Toman unas copas y deciden agredir a su víctima", alega el magistrado. Para tomar esa decisión, influye la presencia de una persona en el grupo que adopta el papel de líder y tiene la idea de repetir lo que ve a través del contenido pornográfico. Sánchez Melgar sostiene que estos autores "tienen convenciones sociales y estereotipadas de la masculinidad y se jactan de ejercer un dominio sobre la mujer".

Los datos se corresponden, a su vez, con un incremento alarmante de las agresiones sexuales. "La Fiscalía ha mostrado su preocupación porque, solo entre 2020 y 2021, las agresiones sexuales crecieron un 58%", expuso el magistrado. También establece una relación entre estos datos y los índices del consumo de pornografía, que visualizan siete de cada diez adolescentes de forma frecuente y tienen su papel, según él, en la falta de educación sexual y afectiva.

Formación desde la infancia

¿Qué se puede hacer al respecto? Sánchez Melgar habla de promover una formación en perspectiva de género que vaya más allá del ámbito educativo y que se adentre también en los hogares y en las familias: "Prohibir no siempre da resultados porque el menor muchas veces no se frena por esto y trata de acceder a esos contenidos por cualquier medio".

A lo largo de seis charlas, jueces, fiscales y trabajadores sociales expusieron sus impresiones y propuestas ante los altos índices de agresiones, que crecieron un 40% el pasado mes de septiembre, según advirtió Ana Brito, directora del Instituto Canario de Igualdad. Brito inauguró las jornadas junto al rector de la ULPGC, Lluís Serra Majem, la vocal del Consejo General del Poder Judicial, Carmen Llombart Pérez, y la magistrada especialista en violencia de género y directora cátedra de Derechos Humanos y Estudios Críticos de Género de la ULPGC, Auxiliadora Díaz Velázquez.

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