Tribunales
El secuestrado por falsos policías en Pozo Izquierdo cree que lo confundieron con otra persona
El supuesto agredido cuenta que se dirigía junto a una conocida a un aparcamiento del cementerio para mantener relaciones sexuales cuando se toparon con un grupo de encapuchados que se hicieron pasar por policías

Los acusados, de espaldas, durante el juicio en la Audiencia Provincial de Las Palmas. / B. M.
Lo que parecía ser una noche de disfrute para una pareja en Pozo Izquierdo se torció en cuestión de minutos. La víctima de un presunto secuestro y robo con violencia explicó este martes en el juicio que se sigue en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas que el 20 de enero de 2019 se dirigía al aparcamiento de la zona del cementerio para mantener relaciones sexuales con una mujer cuando se paró delante del vehículo un grupo de encapuchados haciéndose pasar por policías. Según su versión, lo golpearon, le metieron en el maletero del coche y le quitaron las llaves para entrar a robar en su casa, dejándolo a él y a su acompañante tirados en un descampado de Las Palmas de Gran Canaria. Lo último que le dijeron fue: "Tú no eres a quien estábamos buscando".
La vista oral arrancó con 11 testigos y continuará previsiblemente el miércoles y el jueves con la declaración, al final, de los cinco acusados. La fiscal pide penas de entre 29 y 31 años de cárcel para Jonay M. R., Aridane L. Q., Rayco A. G., Roberto Salvador A. G. y Joel P. H. por presuntos delitos de detención ilegal, lesiones y robo con violencia. Las defensas, por el contrario, reclaman que se anule la prueba practicada en la fase de Instrucción porque se fundamenta en unas intervenciones telefónicas que permitieron dar con el nombre de los investigados, pero que, sostienen, no estaban lo suficientemente fundamentadas e iban en contra de sus derechos fundamentales.
La pareja llegó sobre las 22.00 horas al aparcamiento del cementerio y, al cabo de unos 15 o 20 minutos, se les acercó un grupo de personas con pasamontañas diciendo que eran policías y sacando una placa falsa para demostrarlo. La primera reacción del hombre fue darse a la fuga, por lo que arrancó el coche a bastante velocidad y recorrió 300 o 400 metros en línea recta. Más adelante, cuenta que se paró porque "no tenía nada que ocultar" y habló con los acusados porque pensaba que realmente eran agentes.
"Me metieron en un maletero primero y después en otro y me ataron las manos con el cinto de mi coche"
El supuesto agredido asegura que uno de ellos le preguntó por qué se dio a la fuga y empezó a golpearle. "Después vino otro, no sé si eran dos o tres. Me metieron en un maletero primero y después en otro y me ataron las manos con el cinto de mi coche", añade. Mientras tanto, su acompañante estaba llorando y pidiendo que no le pegaran porque estaba embarazada. Él, que tenía un problema en la vista de un ojo, afirma que no veía prácticamente nada y escuchaba a sus captores hablando por sus teléfonos móviles y repitiendo: "Compi, compi".
Cuando supuestamente le quitaron las llaves de su casa y le llevaron a un descampado de La Montañeta, en la capital grancanaria, se dirigieron a él para preguntarle si su hermano, con el que compartía piso, se iba a "poner tan chulito" como él. "Mi hermano era el único que sabía que tenía dinero, pero no sabía cuánto. Iba trabajando y ahorrando lo que podía", indicó. Los 35.000 euros que le sustrajeron en la casa, según afirma, eran para pagar un apartamento en el sur y se correspondían con la parte que le dio su exmujer por la vivienda en común cuando se divorciaron.
No pudo ver nada
La mujer que lo acompañaba y que, según la Fiscalía, iba secuestrada en la parte trasera del coche con la cabeza hacia delante, aseguró que no la dejaron ver nada y que, cuando pudo mirar por primera vez a su alrededor, se dio cuenta de que estaba en Las Palmas de Gran Canaria. Por tanto, no pudo observar si golpearon a su acompañante ni el rostro de sus captores. Solo se dio cuenta de los golpes que había recibido el conocido que la acompañaba cuando se quedaron solos en el descampado.
"Vi que estaba muy herido, tenía toda la cabeza reventada, y lo llevé en coche al hospital"
"Vi que estaba muy herido, tenía toda la cabeza reventada, y lo llevé en coche al hospital", afirmó la víctima. Como ella no sufrió lesiones y "estaba muy asustada", no pidió ningún parte médico ni reclama por los hechos.
También declararon el hermano y un amigo de la víctima, que estaban durante esa madrugada viendo una película en la televisión cuando les sorprendió un grupo de cuatro personas que entraron a la vivienda haciéndose pasar por policías. Enseñaron la placa y les dijeron que su hermano estaba detenido, pero cuando les pidieron la orden de registro empezaron a golpearlos, según declararon los supuestos agredidos.
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