Son la quintaesencia del pop de guitarras revivalistas de la Edad de Oro de las Riot Grrrl en los noventa. Un grupo, además, recomendable tanto para aquellos que aman las propuestas desenfrenadas de The Wipers como los que se decanten por el pop inofensivo de The Shangri-Las. Música, en definitiva, recomendable para los punks domesticados y los poperos enfurecidos. Después de su tercer álbum, Share the joy de 2011, las tres integrantes de la banda neoyorquina se separaron y Cassie Ramone (voz y guitarra), Katy Goodman (bajo y coros) y Ali Koehler (batería y coros), que se conocían desde que eran adolescentes, pudieron dedicarse a otras actividades y a proyectos musicales nuevos pero establecidas desde entonces en Los Angeles.
Por un lado, Katy Goodman y Ali Koehler continuaron haciendo música bajo los nombres de La Sera, Best Coast y Upset. Por el otro, la líder, Casie Ramone, continuó haciendo arte en Brooklyn, lanzó dos discos en solitario y otros dos trabajos junto a Kevin Morby como The Babies. Todos ellos fueron proyectos recomendables pero que no llegaban al nivel de las Vivian Girls originales. Quizás por eso, el año pasado, después de que una llamada telefónica de Goodman al resto de sus excompañeras, surgió la idea de tocar música juntas nuevamente. Y el resultado ha sido este Memory, un álbum potente y refrescante, que recupera el powerpop de los grandes combos independientes como The Wedding Presents o Mega City Four, aunque con unas letras, sin embargo, llenas de reflexiones personales sobre las relaciones tóxicas, la falsa promesa de un nuevo amor, problemas de salud mental y la búsqueda de formas de aceptarse en medio de todo. El resultado exhala la ambigüedad de una lírica cruda con un sonido optimista que ya distinguía a la banda durante su primera encarnación del resto de sus coetáneos.
Y por ese mismo motivo, el nombre del grupo -que es un homenaje a la obra maestra del escritor e ilustrador norteamericano Henry Darger- se ha convertido en sinónimo de la nueva música alternativa en su faceta menos complaciente. Ya, el primer tema, Most of all, es una potente pieza melódica que tiene todo el encanto de las Shops Assitence. Y otros títulos como You kind of life o At it again recojen la esencia de las también inolvidables Babies in Toyland o incluso Killer Barbies.
