La Policía Nacional detuvo en la noche del lunes a una mujer en su domicilio de la calle Galileo Galilei, en el barrio de Casas Nuevas, como presunta sospechosa del asesinato de José Manuel Domínguez, un exfuncionario jubilado del Ayuntamiento de Telde que falleció a causa de las puñaladas recibidas en su vivienda de esa misma calle a finales de agosto del pasado año. La víctima, de 68 años, fue encontrada amordazada y con signos de violencia. Fue un crimen que alarmó a este tranquilo barrio junto al cruce de Melenara y atemorizó a vecinos y familiares.

Las pesquisas del Cuerpo Nacional de Policía continuaron ayer por la mañana, a primera hora, con la presencia de agentes de la Policía Científica, que al parecer buscaron en la casa de la presunta agresora para localizar el arma homicida, un cuchillo con el que supuestamente acabó con la vida de Domínguez. La llegada de los efectivos policialesa la calle Galileo Galilei, según ha podido saber este periódico, alertó a los residentes, pero poco más ha trascendido. La investigación está bajo secreto de sumario y no se ha dado información oficial sobre estos hechos.

De hecho, el barrio era ayer por la mañana una zona donde solo la actividad de los comercios resonaba en el silencio de las calles, en las que los vecinos expresaron no saber nada de este giro en las pesquisas. Unas pesquisas que se iniciaron a principios del pasado septiembre después de localizarle el cuerpo sin vida de este exfuncionario, apreciado en el barrio y de cuyos compañeros de trabajo lo consideraban una buena persona y muy trabajadora. Elegante, educado y con afición a vestir bien fueron algunas de las definiciones realizadas por quienes lo conocieron, que no se explicaban el motivo de la saña con la que había actuado el agresor con el difunto.

Esta detención es la segunda que se conoce después de la realizada a principios de septiembre por los agentes policiales, que el día 3 llevaron a la comisaría a un hombre de unos 70 años de edad al encontrarse en su vivienda prendas ensagrentadas que pudieran ser de la víctima. Sin embargo, varios días después fue puesto en libertad por la jueza que instruía el caso e incluso el fiscal tampoco solicitó su ingreso en prisión.

Ésa ha sido hasta el lunes la única información conocida que se tenía sobre este misterioso crimen en Casas Nuevas, donde Domínguez, pintor municipal jubilado, pudo recibir hasta 18 puñaladas por parte de su agresor. Después de casi un año de investigaciones, la detención de esta mujer, de la que no ha trascendido su identidad, reactiva un caso que ha estado latente en el barrio y que ahora, a la espera de las diligencias realizadas por la Policía Nacional y el Juzgado pone de actualidad los hechos ocurridos hace 11 meses.

El 30 de agosto de 2015 el barrio de Casas Nuevas se encuentra con la noticia de la aparición del cadáver de José Manuel Domínguez amordazado y con evidentes signos de violencia. La descripción realizada esos días habla de hasta 18 heridas asestadas con un puñal decorativo propiedad de la víctima y que su asesino utilizó con saña.

Los agentes no encontraron indicio de robo y la investigación se dirigía a un crimen de tipo personal, algo que causó extrañeza en el vecindario. Varios días después es detenido un hombre de unos 70 años como presunto autor del crimen, pero después de escuchar su declaración, plagada de incoherencias según se pudo saber desde la investigación fue puesto en libertad a los pocos días.

Casi un año después

Han transcurrido 11 meses desde el inicio de la investigación, que se ha llevado con total discreción en este tiempo y que había quedado también semiolvidada por los medios de comunicación y la ciudadanía ante la falta de novedades.

La actuación de la Policía Nacional el lunes por la noche y de la unidad científica ayer ha despertado del letargo sobre este caso al barrio, cuyos residentes se encuentran con la noticia de una nueva detención de una vecina de la zona y con la búsqueda del arma homicida. Se trate o no de la finalización de las pesquisas, el tiempo transcurrido desde la primera detención hasta esta última ha supuesto una incógnita sobre lo sucedido a finales del mes de agosto de 2015, con la aparición del cadáver de José Manuel Domínguez. Es el primer crimen que se recuerda en este tranquilo núcleo residencial de Telde.