El cisne negro australiano es el nuevo inquilino del Centro de Recuperación de Aves desde este miércoles. Después de su sorprendente aparición ese mismo día en la playa de Melenara y su captura por dos bañistas, pasó a disposición de la consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, que lo aloja en un jaulón preparado para un águila real mientras se intenta localizar a sus dueños.

Pascual Calabuig, veterinario del Centro de Recuperación de Aves, ubicado en Tafira, afirmó ayer que están investigando la procedencia de este fugitivo , pero hasta el momento lo único seguro es que se puede descartar que se haya escapado de Palmitos Park o del parque urbano Juan Pablo II de Siete Palmas, barrio de Las Palmas de Gran Canaria.

Todo apunta a que este ejemplar originario de Australia se haya escapado de algún lugar en el que nadie advirtió que le habían crecido las alas y ya podía volar. Calabuig añadió que "es costumbre recortar a las aves las alas para que no vuelen, pero vuelven a crecer". Tal es así que este soberbio cisne negro con un pico rojo, que presenta un aspecto impecable, muy vistoso, es todo un atleta con un poderío que le permite recorrer largas distancias, por ejemplo, llegar hasta Tenerife o Fuerteventura.

Pero también es bastante desconfiado. Lo demostró en Melenara, donde se alejaba de los bañistas cuando estos intentaban acercarse a él para tocarlo, sacarle fotos o v vídeos. Y ahora sigue con la misma actitud distante en el jaulón donde se le albergará hasta el próximo lunes, plazo fijado por los responsables del centro para que sus dueños lo recojan y se lo lleven. "Está comiendo bien, tiene un aspecto magnífico, pero no deja que nadie se le acerque", explicó el veterinario, quien indicó que el ave permanecerá hasta el lunes en las instalaciones y si nadie lo reclama, se le trasladará a otro espacio público, "ya que ocupa el espacio destinado a un águila real y aquí no puede estar".

A la espera de su futura ubicación, se barajan varios lugares, como el parque urbano Juan Pablo II en Siete Palmas e incluso en Telde, aunque el parque de Santa Rosalía, más conocido como el de Lulú y que podría ser su hogar, no reúne las condiciones necesarias. El complejo de Palmitos Park también puede ser otro espacio para que este bello ejemplar, que fascinó durante horas en Melenara, recale de forma definitiva.

Al respecto, Pascual Calabuig señaló, ante las quejas por la tardanza en su recogida de la playa, que "la aparición del cisne fue un día festivo y, además, estamos en plena campaña de recuperación de las pardelas, no podíamos abandonar este labor para atrapara a este ave".

Asimismo, destacó la colaboración ciudadana en la captura del cisne que, esquivo, se alejaba mar adentro si alguien se le acercaba. Finalmente, pudo ser atrapado y se llevó a tierra, hasta que miembros del Centro de Recuperación de Aves se desplazaron a la cala para llevárselo a sus dependencias.