Luis Laborda y Ricardo Medina, párrocos del Valle de Jinámar, ofrecieron ayer un pregón a dúo en la iglesia de este barrio teldense con motivo del inicio de las fiestas de la Inmaculada Concepción y la Caña Dulce, que se clausurarán el 8 de diciembre, su día grande. El acto, previsto para las 20.00 horas, contó con la asistencia de ciudadanía y políticos, que abarrotaron el templo del pueblo. En su intervención, ambos sacerdotes destacaron la importancia de la imagen de la Inmaculada Concepción no solo para Jinámar o Telde, sino para Gran Canaria. Destacaron que las fies-tas fueron declaradas de guardar en el siglo XVI por el obispo Muros y que cuentan con gran devoción desde hace siglos. Una devoción que surgió al convertirse Jinámar en un lugar de paso. Después del pregón, el grupo de música popular Atlántico LPGC, ofreció un recital en la iglesia. Informa: P. H.