La concejala de Educación del Ayuntamiento de Telde, Marta Hernández, admite que "es probable que las obras de rehabilitación de la fachada del Príncipe de Asturias no se puedan realizar hasta pasadas las navidades". La responsable del área sostiene que los técnicos están desarrollando una valoración económica "para sopesar si desde la institución podemos ejecutar los arreglos con recursos propios o, si por el contrario, debemos exteriorizar el servicio".

El problema surge por la caída de cascotes de la fachada del edificio infantil que da al patio interior escolar, hecho que tuvo lugar en la tarde noche del pasado lunes. "Será difícil que lo podamos solucionar con nuestros propios medios, por la falta de personal entre otros asuntos, así que seguramente tengamos que exteriorizar el servicio y realizar un contrato; lo que lleva su tiempo y habrá que ser pacientes", explicó ayer la concejala, que añadió que "estamos haciendo todo lo posible por solucionarlo antes de que lleguen las navidades, pero si debemos externalizar habrá que hacer una valoración técnica y pasarlo a Contratación".

Asimismo sostiene que "desde que se produjo este incidente nos hemos puesto en marcha para que los niños puedan estar seguros y las profesoras de infantil puedan continuar impartiendo las clases con normalidad".

De hecho, en cuanto al servicio educativo del Príncipe de Asturias, la dirección del centro escolar envió un comunicado a los padres de los pequeños para avisarles de que el próximo lunes se cancelarán las clases de infantil como medida cautelar y "para poder trasladar todo el material de las aulas que se encuentran en el edificio afectado a otras zonas del centro", aseguró con seguridad Hernández.

De este modo, los alumnos de infantil podrían reincorporarse el martes en nuevos espacios habilitados para sus respectivas lecciones. "Las nuevas aulas para los grupos de cuatro y cinco años serán la biblioteca, el aula de PT, al lado de secretaría, y el actual aula de inglés", comunicó el consejo escolar a través de un mensaje remitido por una conocida red social y aplicación móvil.

Precaución

Estas clases se encuentran en la planta baja del edificio principal, por lo que los pequeños no tendrán que atravesar la zona afectada por la caída de cascotes. "Las alumnos permanecerán en estos espacios seguros hasta que podamos ejecutar la reforma", recordó Marta Hernández. "En principio teníamos pensado hacer el traslado ayer", confiesa la concejala de Educación. "Sin embargo, las docentes no iban a estar presentes por el puente y nos solicitaron que los pospusiéramos hasta el lunes; de esta manera ellas darán las directrices a los trabajadores municipales, ya que son las que conocen qué materiales son necesarios para sus clases", aseguró Hernández.

La concejala confía en que el desplazamiento de los materiales "no se alargará más de una mañana, ya que mandaremos a una cuadrilla de cinco trabajadores y las profesoras también ayudarán". No es la primera vez que el centro, que se sitúa en el barrio costero de Melenara, tiene problemas con sus infraestructuras. Hace cuatro años la asociación de Madres y Padres de Alumnos Las Rubiesas denunciaron al Ayuntamiento de Telde y, en concreto, a la Concejalía de Educación por el mal estado de los edificios del centro infantil y primario. Los aleros con los hierros salientes, las canastas de baloncesto oxidadas, los socavones en el patio de recreo o las ventanas atascadas eran algunas de las deficiencias del colegio en el año 2014 y por las que el Ayuntamiento tuvo que realizar una obra de emergencia.