La finca de El Viso se ha convertido en los últimos meses en un campo de experimentación de proyectos relacionados con el sector de la agricultura ecológica, así como un centro de formación completo en donde se puede poner en práctica los conocimientos adquiridos sobre la tierra.
Los beneficiados de esta iniciativa son ocho personas desempleadas, pero con muchas ganas de innovar y emprender en el sector primario o, por otro lado, formarse para tener la oportunidad de ofrecer sus conocimientos en una empresa agroalimentaria.
Los agentes impulsores son la fundación Caja de Canarias, Bankia y el Cabildo de Gran Canaria mediante su proyecto Ecoinnova, que nace con el objetivo es promover el autoempleo y el emprendemiento dentro del sector de la agricultura ecologica. Con este plantemiento, asociaciones como Adesco (que fueron impulsores de la dinamización de la finca de El Viso, abandonada desde hace años) buscan fomentar el desarrollo de otros terrenos o fincas sin uso en el municipio de Telde como la finca de La Herradura o las parcelas de San Pedro Mártir. Las ideas son miles, pero por lo pronto se centran en la rehabilitación de la del Viso, que gracias a su asociación el terreno ha cobrado vida y además aprovechan para dar formación de poda, de injerto y de iniciación a la agroecología. "Nos gustaría que El Viso pudiera convertirse en el centro de formación agrícola de la zona Sur de la Isla", afirma Antonio Navarro, técnico y monitor agrícola y miembro de la asociación.
Asimismo, el programa Ecoinnova comenzó en septiembre con una formación en materia de agricultura ecológica, nutrición y emprendaduría, y ahora los participantes deberán poner en práctica lo aprendido para desarrollar del mismo modo las ideas de negocio que ellos mismos han presentado. El cultivo de flores comestibles, el fomento de los huertos urbanos o la sintetización de clorofila para aplicar a la alimentación humana son sólo algunos de estos proyectos, que tendrán la oportunidad de ser valorados en la finca teldense para comprobar su verdadera viabilidad en el mundo laboral. "Lo que buscamos es que esas grandes ideas que ellos tienen se lleven a un nivel real; que hagan pruebas del material que necesitarían para llevarlas a cabo, que desarrollen qué tipos de servicios podrían ofrecer o que busquen fórmulas de comercialización de los mismos", explica Domingo Villanueva, secretario de la cooperativa de productos ecológicos Biocanarias y técnico de Ecoinnova.
"Es un proyecto buenísimo, porque se fomenta la emprendeduría y se aportan muchas ideas de negocio para el sector agrícola en la Isla", añade. De hecho, una vez concluya este paso la intención es conseguir que los emprendedores las desarrollen en otras fincas y que los participantes que no deseen emprender con un negocio propio sean capaces de conseguir empleo en el sector. "El equipo de profesionales de la agricultura que forma parte del proyecto es grande, y estamos para orientar a los participantes porque no sirve de nada tener una buena idea si esta no es viable; sin embargo, lo que demuestran este tipo de programas es que puede darse la agricultura ecológica en Canarias y eso es fantástico", sostiene.
"Lo importante es revalorizar la profesión agraria, por lo que el proyecto contempla todas las fases en las que se encuentran los participantes y sus intenciones: si buscan impulsar un negocio propio u ofrecer sus servicios a un negocio u proyecto agrícola", aseguran los técnicos de este programa.
Asimismo, el Ayuntamiento de Telde también muestra su compromiso. "Proyectos así ayudan a que las personas sin empleo no se vean frustradas por su situación, sino todo lo contrario: les impulsa a pensar y a atreverse con sus propios proyectos y eso es muy positivo", asegura Marta Hernández, concejala de Agricultura, que formó parte de una reunión celebrada el pasado viernes en la finca con otros miembros de la corporación teldense, técnicos del programa Ecoinnova y miembros de la asociación Adesco.
Por otro lado, Ecoinnova fue presentado en febrero del año pasado con la idea de promover el autoempleo y el emprendemiento dentro del sector de la agricultura ecologica y su desarrollo se está llevando a cabo tanto en la finca teldense, situada en Montaña Las Palmas, como en la finca de El Soleto de Guía. El programa cuenta con un presupuesto de 747.000 euros, de los que 523.000 euros corresponden al Servicio Canario de Empleo, 180.000 al Cabildo de Gran Canaria y 44.000 a Bankia. "En el Viso se plantearan varios proyectos que contemplan el cultivo de frutas tropicales, de hierbas aromáticas y medicinales, de flores comestibles, la sintetización de clorofila, el desarrollo de huertos hurbanos o de fibra de cáñamos entre otras ideas; algunas se encuentran en una fase más madura y otros están aún un poco verdes, pero als insituciones ya han asegurado que pondrán de su mano para que la mayoría pueda llegar a una realidad", explican.
