La Fiscalía mantuvo ayer la petición de ocho años y medio de cárcel al hombre que atropelló a otro el 20 de junio de 2011 en el barrio de Las Huesas tras calificar los hechos de tentativa de homicidio.
En la última sesión del juicio llevado en contra de Ayoze C. B. R., por atropellar a Juan C. O., la fiscal del caso aseguró que durante todo el proceso el letrado de la defensa "ha intentado quitar responsabilidad al acusado y atribuírsela a la víctima" y sostuvo que los daños que presentaba el coche del agresor son producto del impacto con el cuerpo del agredido y no por una piedra como afirmó la defensa.
De igual forma, rechazó que en el acusado pudiesen concurrir los atenuantes de pago de responsabilidad civil, confesión y dilaciones indebidas solicitadas por el letrado defensor, ya que asegura que en su primera declaración no hizo un relato completo, que el pago de la responsabilidad civil no repara el daño y que el proceso se ha demorado casi ocho años gracias a que "la defensa ha intentado desviar la causa". Además, recalcó que se le debe atribuir el agravante de alevosía en segundo grado.
El abogado de la acusación particular, Miguel Blázquez, solicitó diez años de prisión para el imputado y entiende que concurre la agravante de abuso de superioridad por haber usado su coche como arma para intentar matar a Juan C. O.
El letrado de la defensa, Eduardo López Mendoza, requirió para su cliente la libre absolución o que se le condene de uno a dos años de cárcel por un delito de lesión por imprudencia. Asimismo, afirmó que su defendido jamás amenazó a la víctima con hacerle daño, y resaltó que quien utilizó la frase "te voy a matar" fue el agredido. Además, recalcó que Juan C. O. aceptó que ha recibido indemnización de dos aseguradoras por accidentes de tráfico. Por tanto, sugirió que el agredido se dedicaba a provocar este tipo de situaciones.
Esta tesis que fue rebatida por el Ministerio Fiscal y la acusación particular, al recordar que tres testigos declararon haber visto como Ayoze C. B. R., redirigió el coche y dio una vuelta rápida con el fin de atropellar a la víctima para intentar causarle la muerte.
El letrado de la defensa reveló que existía un acuerdo entre las partes tras pagar 28.742,92 euros, sin embargo, la acusación particular reveló que no se realizó la entrega de la responsabilidad civil, por lo que quedó sin efecto. El juicio quedó visto para sentencia.
