La Fiscalía Provincial de Las Palmas pide 15 años menos un día de prisión a un policía nacional que intentó asesinar a su exmujer tras propinarle una paliza y asestarle varias puñaladas en el domicilio que ambos compartieron durante relación sentimental, ubicado en Telde. Para el momento, estaban definiendo los terminos de la custodia del hijo, menor de edad, que tienen en común.

La calificación del fiscal revela que el José B. O., de 41 años de edad al momento de los hechos, mantuvo una relación sentimental con la víctima durante seis años, en la que procrearon un hijo. Sin embargo, la pareja decidió separarse en noviembre de 2016, cuando el menor tenía seis meses aproximadamente de nacido.

Por ello, la agredida vivió unos días fuera de la vivienda que estuvo compartiendo la pareja durante la relación, situada en el barrio de San Gregorio. No obstante, el 14 de febrero de 2017 regresa al domicilio acompañada de su bebé, por lo que el procesado decidió marcharse, pese a esto, conservó las llaves del piso.

Posteriormente, sobre las 10.00 horas del 4 de marzo de 2017, el encausado que, "no toleraba que su exmujer y su hijo hubiesen vuelto a la vivienda de su propiedad", llegó al domicilio en compañía de su padre con el fin de cambiar la cerradura del cuarto trastero ubicado en el garaje del piso, en el que se encontraban pertenencias de su expareja.

Más tarde, José B. O., pidió a su padre que se quedase en la calle y le esperase allí, mientras él subía al domicilio en el que estaban la víctima y el bebé de 11 meses de nacido. El procesado entró al piso con su llave, por lo que al estar dentro se trasladó a la habitación donde se encontraba el hijo de ambos y procedió a conversar con la agredida durante 19 minutos.

El motivo de la charla se basó principalmente en recibos y facturas sobre los gastos correspondientes a la vivienda. Además, el acusado también pidió a su expareja que le entregase el mando del garaje, petición a la que la mujer, de unos 37 años, se negó a acceder.

Así, el acusado le solicitó a la víctima que se trasladase a la cocina para preparar el biberón del menor, y tras unos segundos procedió a acompañarla. Una vez que la mujer se situó en la encimera de la cocina y comenzó a preparar el alimento de su bebé, el procesado volvió a pedirle el mando del garaje y "con el propósito de acabar con su vida y evitar lo que consideraba como un injusto perjuicio patrimonial" del que culpaba a su exmujer, la abordó por la espalda de forma sorpresiva.

El hombre cogió a la agredida por el cuello y le apretó fuertemente "con la intención de asfixiarla", según recoge la Fiscalía. Acto seguido, el acusado la agarró del cabello y comenzó a "golpear su cabeza contra los muebles de la cocina", después la tiró al suelo para propinarle una paliza, mientras le espetaba frases como "¿Esto es lo qué querías, dejar a un hijo huérfano?".

Tras patearla y darle puñetazos, el encausado cogió un cuchillo y se lo asestó a la víctima en varias oportunidades, cuando ella tenía el rostro contra el suelo. El arma cuchillo se dobló por completo, así que el hombre tomó otro y continuó así la agresión.

Pese a esto, la mujer logró levantarse y correr hasta la puerta de la vivienda y la abrió encontrando a un vecino que se acercó al escuchar los gritos, sin embargo, el procesado no permitió que la madre de su hijo se escapara y cerró la puerta sin que el testigo pudiera ayudar a la víctima. Pasaron 11 minutos para que la Policía accediera al domicilio y tumbase la puerta, en los cuales, el procesado apuñaló a la afectada en el cuello, espalda, cabeza, brazos, tórax y piernas.

Todo sucedió mientras su hijo lloraba y los vecinos y el padre del procesado golpeaban la puerta para que este la abriera. "Yo no me voy de aquí hasta que te mueras" dijo el hombre antes de que la Policia interviniera.

La víctima sufrió varias heridas para las cuales requirió de 137 días de curación, de los que, siete fueron de ingreso hospitalario. A raíz del ataque presenta secuelas motoras y sensitivo motoras de origen periférico de antebrazo, trastorno ansioso depresivo y perjuicio estético moderado. Por esto, la acusación pública pide 15 años menos un día de cárcel por el delito de tentativa de asesinato con las agravantes de parentesco y razones de género. Así como, la privación de la patria potestad del menor y la prohibición de acercamiento y comunicación con la agredida durante 25 años.

La Fiscalía también reclama una indemnización de 136.400 euros por lesiones, secuelas y daños morales.