La lucha por la igualdad de género llega hasta las bibliotecas y, en el caso del instituto Lila-que se ubica en el barrio de Jinámar- lo hace a través de un punto violeta. El centro ha establecido un rincón dedicado exclusivamente a las escritoras, con la intención de visibilizar su labor en el mundo de la literatura y del ensayo y fomentar su lectura entre el alumnado.
Esta actuación inició el año pasado los trámites para que el centro se convirtiese ayer en el primer instituto de la comunidad autónoma que se une al proyecto nacional 'Bibliotecas en igualdad' que impulsa el colectivo feminista Clásicas y Modernas a través del Plan de Fomento de la Lectura del Ministerio de Cultura. El objetivo está muy claro: dar valor a la mujer en el ámbito de la cultura y del conocimiento. La directora de este instituto, María Jesús Mena, y la secretaria general de la asociación, Marina Gilabert, se reunieron ayer para firmar la adhesión e inaugurar la primera biblioteca con perspectiva de género en Canarias, en la que se llevarán a cabo diferentes actuaciones en colaboración con el equipo docente del centro y su alumnado con el fin de desarrollar este espacio para que se convierta en un referente en la lucha por la igualdad. Al acto asistió el alcalde, Héctor Suárez, junto a los concejales de Igualdad y Cultura, Jonay López y Juan Martel. "Es importantísimo luchar contra la lacra de la desigualdad a través de pequeñas acciones como estas, que consiguen grandes cambios", sostuvo el mandatario. "Desde el área de Igualdad estamos trabajando para recuperar acciones en prevención, sobre todo en edades tempranas, en los colegios e institutos, con el fin de erradicar la violencia de género y ayudar a fomentar una sociedad más justa e igualitaria", añadió.
La vicedirectora, Paula Muñoz, ha sido una de las principales impulsoras del proyecto en el centro educativo. "Todo comenzó el año pasado mediante el ciclo formativo en Promoción de Igualdad de Género", comenzó a relatar, haciendo hincapié en que esta oferta académica es única en la Isla y que el centro educativo fue pionero en la provincia de Las Palmas en incluir este tipo de formación. Muñoz explica que dentro de los ejercicios prácticos que realiza el alumnado de este ciclo se procedió a separar los ejemplares del fondo bibliográfico según el género del autor "para impulsar al resto de alumnos del centro a darse cuenta de la desproporción que hay entre los hombres y las mujeres en el mundo de la literatura y el ensayo", explicó.
La intención era llevar a la reflexión al alumnado y, finalmente, se procedió a una reorganización de los libros de la biblioteca. "Los escritos por mujeres fueron instalados en unas estanterías que pintaron de violeta, con la intención de visibilizar a las autoras y al mismo tiempo hacer notar lo vacías que están las cajoneras de este espacio", explicó, ya que se descubrió que este conjunto bibliográfico era muy escaso, en comparación con los escritos por hombres.
A raíz de este trabajo se investigó sobre las autoras, recopilando sus datos biográficos y su trayectoria profesional. Asimismo, en el Día de Canarias se dedicó un espacio a ensalzar la figura de las escritoras canarias y durante el curso también se creó un mural con frases célebres de mujeres que destacan en la cultura.
Nuevos objetivos
Ahora, mediante la inscripción a este proyecto nacional, el equipo docente y el alumnado del centro educativo se ha propuesto el objetivo de continuar ejecutando actuaciones para poner en valor a este grupo de mujeres escritoras (en su mayoría olvidadas) y visibilizar su trabajo.
Las líneas generales pretenden activar una mirada crítica con perspectiva de igualdad y solventar la gran desproporción que existe entre literatura escrita por hombre y por mujeres. Por otro lado, gracias al adhesión a este proyecto nacional, el centro tendrá mayores posibilidades de subsanar el desequilibrio que actualmente existe en su fondo bibliográfico (aumentado cada vez más el número de libros de autoría femenina).
Desde la dirección auguran que llevarán a cabo encuentros literarios con el alumnado, charlas sobre perspectiva de género en la biblioteca y que elaborarán un catálogo digital para registrar el número de escritoras (sobre todo haciendo especial hincapié en las autoras canarias). "También tenemos la intención de establecer alianzas con otras bibliotecas de otros centros y municipales", añade Muñoz.
