Un ciudadano estacionó su ve-hículo y pernoctó en las dunas fósiles del barrio de Tufia, una zona clasificada como Sitio de Interés Científico por albergar un poblado aborigen de viviendas-habitación, provocando daños en el área e incluso arrancando los pivotes de madera que fueron puestos para impedir la entrada a este espacio protegido.

El área de Medioambiente del Ayuntamiento de Telde ha denunciado esta situación al Cabildo Insular de Gran Canaria, con el fin de que pueda hacerse cargo la institución insular de la reparación de los desperfectos causados por ser la institución competente en materia de espacios naturales. Asimismo, desde el departamento agradecen la colaboración vecinal, pues aportaron datos esenciales para llevar a cabo la identificación de la persona infractora.

El edil responsable, Álvaro Monzón, destaca que "en la zona se encuentran endemismos vegetales protegidos y seriamente amenazados". También recalca que es un lugar de especial interés científico en gran parte por "el carácter fósil de los depósitos dunares y la abundancia de restos de fauna invertebrada que en el pasado fueron más abundantes". Estas características singulares del bien paisajístico son claves para entender la importancia de los hechos denunciados y reprobados por la administración local.

Características

Por otra parte, el concejal Monzón explica que este espacio posee un total de 54,1 hectáreas, ubicado en la linde entre Ojos de Garza y Tufia, con depósitos arenosos fosilíferos que alcanzan con frecuencia una potencia de varios metros. Es una zona de vegetación dominada por especies como la uva de mar común y la lechetrezna de playa, que viven junto a otras más raras como el chaparro y la piña de mar . Por ello, el cuidado del espacio es indispensable para la supervivencia y estabilidad de las especies vegetales.

Las múltiples características que posee ha provocado que se unan varias figuras de protección además de la SIC, como pueden ser las de Zona Especial de Conservación, Zona Especial de Protección de Aves y Bien de Interés Cultural, el cual fue aprobado el 5 de julio de 1973.

El marco paisajístico de la playa de Tufia es una playa de arena negra de 40 metros de longitud y 20 de ancho. Orientada al sur de un promontorio del mismo nombre, es de aguas tranquilas al estar bien protegida del alisio que azota el resto de la costa.