Un grupo de voluntarios que se encontraban limpiando los alrededores de Tufia se han encontrado este viernes con un macabro hallazgo en su jornada de trabajo comunitario. Una de las personas ha localizado los restos óseos de un perro que, supuestamente, habría muerto de inanición tras ser abandonado a la intemperie en esta zona del litoral de Telde.

Los huesos del can, que se encontraba amarrado a una roca a la intemperie, estaban en una zona desértica y de díficil acceso por la que rara vez transita alguien, por lo que se intuye que su muerte pudo ser lenta y dolorosa, puesto que nadie podía acercarse para auxiliarle.

En un vídeo que han hecho llegar al colectivo animalista Leales.org, se ve cómo el animal estaba amarrado junto a un promontorio de pequeñas rocas con una correa de plástico, en medio de una zona en la que no tenía posibilidad de beber agua ni alimentarse.

Según la organización de protección animal, Telde es "cada vez más conocida como ciudad enemiga de los animales" y afirma que es "urgente" aprobar una actualización de la Ley de Protección Animal en el Parlamento de Canarias, que data de los años 90.

El objetivo de la normativa sería disuadir a los maltratadores del delito de abandono y muerte de animales y tratar de paliar que se vivan situaciones como esta.

De hecho, la ciudad ya fue noticia esta misma semana después de que una vecina de Jinámar encontrara en un cubo de basura a una cría de gata siamesa, de apenas un mes de edad, a la que le habían arrancado los ojos antes de tirarla al contenedor, y que se encuentra grave por las infecciones en sus globos oculares.

Estos hechos, afirman desde el colectivo animalista, se encuentran siendo investigados de oficio por la Policía Nacional a través de la Brigada de la Policía Judicial de Telde.