La Federación Ben Magec–Ecologistas en Acción rechaza con rotundidad la licitación de la redacción del proyecto para la construcción de la GC-5, conocida como tangencial de Telde, anunciada recientemente por el presidente del Cabildo Insular, Antonio Morales, y Sebastián Franquis, consejero de obras públicas del Gobierno de Canarias. El colectivo critica que las instituciones desechen alternativas “más sostenibles, útiles y económicas” para solucionar los problemas de congestión de tráfico de la autopista y recriminan que los gobernantes desarrollen nuevas propuestas. “Siguen apostando por las soluciones que se han venido mostrando como inútiles en los últimos cuarenta años: hormigón y asfalto a raudales”, expresan.
Asimismo, señalan que estas administraciones “entran en contradicción” al plantear proyectos de planteamiento ecológico en la Isla para hacer frente a la lucha contra el cambio climático y “promover una nueva autopista de seis carriles que va a tener un impacto muy negativo no solo en emisiones de carbono sino también sobre el territorio, el patrimonio natural y cultural”. Asimismo, añaden que este proyecto, que pretende conectar el municipio teldense con la GC-3, afectará también a las actividades económicas de base agraria.
La portavoz de la federación ecologista, Noelia Sánchez, sostiene que esta actuación “es un nuevo despilfarro de dinero público que podría ahorrarse si se invierte en favorecer a la guagua” y afirma que el proyecto ha generado un profundo rechazo entre los vecinos de las zonas afectadas. “Están desechando las verdaderas medidas de adaptación a la emergencia climática como la que supondría el carril Bus/VAO, acompañadas de otras medidas que mejoren la frecuencia y eficiencia de las guaguas, la accesibilidad local y que pacifiquen el tráfico en la GC-1”, concluye.
