El sector empresarial de Telde parece revitalizarse en tiempos de crisis, aunque suene contradictorio. Y es que un total de ocho de emprendedores han puesto en marcha nuevos negocios en la zona comercial abierta de San Gregorio tras los meses de confinamiento, según datos que ofrecen desde el departamento de Desarrollo Local del Ayuntamiento. Sin embargo, lo más impresionante es que durante la pandemia solo se ha producido un cierre en esta zona del casco del municipio y no ha sido por motivos económicos, sino por jubilación. “El municipio está resistiendo con éxito”, expresa con orgullo la concejala, Lidia Mejías, que resalta el interés de muchos ciudadanos en fomentar el autoempleo.

De hecho, más de 200 personas han solicitado asesoramiento empresarial con la intención de poner en marcha nuevos proyectos personales. A través de un programa municipal que se puso en marcha el pasado mes de septiembre y fue financiado íntegramente por el área de Empleo del Cabildo insular con un presupuesto de 101.130 euros, los empresarios encargados de pymes, autónomos y otros interesados han tenido la opción de solicitar información para mejorar o iniciar un negocio en el municipio. Asimismo, este recurso (que acabará el próximo 31 de marzo, aunque desde el Consistorio ya se ha solicitado la puesta en marcha de un proyecto similar) supuso la contratación de cinco técnicas especializadas en empresariales, derecho social y desarrollo que ejercieron diferentes talleres y resolvieron dudas por vía telemática.

En momentos difíciles cada uno busca las formulas pertinentes para sobrevivir. Es el caso de Gabriel León y Evelyn Socorro, que con tan solo 24 y 23 años se aventuraron a abrir Turofilia, un negocio de alimentación, el pasado diciembre. “Me quedé sin trabajo, teníamos algo de dinero ahorrado y en vez de esperar a que se gastase decidimos invertirlo”, explica el joven, que añade que elogia el programa de asesoramiento. “Nos han proporcionado información sobre muchos asuntos, como las subvenciones a las que podemos acogernos o la documentación que tenemos que entregar”, explica.

También Jared Romero cuenta su experiencia en el proceso de emprendimiento, realizando la apertura de un centro de apoyo familiar para el cuidado de menores que han denominado ‘Mi mundo feliz’. “Inauguramos el pasado julio; era algo que ya quería hacer antes de la pandemia y tenía que decidir si retroceder o seguir para adelante”, sostiene, agregando que decidió aventurarse porque “estaba seguro de mi proyecto”. Romero ha asistido a algunos de los talleres que ofrecen desde el programa de asesoramiento, relacionados con inteligencia emocional y marketing digital. “Nos hemos dado cuenta de que uno de los mayores problemas que tienen los negocios tiene que ver con el marketing y con la venta online”, asevera la edil, que asegura que desde el Ayuntamiento están haciendo todo lo posible para ofrecer herramientas a los empresarios para subsanar esta falta de conocimientos al respecto.

Y aunque es el mayor hándicap para la mayoría, no para Yube Herrera y Sabrina Stoppa, propietarias de ‘La canastilla del bebé’, una tienda-taller de ropa y accesorios para infantes que abrió sus puertas hace unos meses. “He estado más de 15 años vendiendo online mis productos y a pesar de la pandemia, me vi en la necesidad de ampliar mi negocio porque en casa no tenía más espacio y la demanda no cesaba”, expresa Herrera, que aunque procede de Valsequillo, consideró el casco comercial de San Gregorio como un buen punto estratégico.

En definitiva, el proyecto de asesoramiento ha sido fructificante. Desde el Consistorio resaltan que además de las nuevas empresas asentadas en el barrio comercial, otras cinco ya han iniciado su actividad en otras localidades y aún están en proceso para abrir otras seis.