El oleaje ha sido siempre un problema para las viviendas de la costa de Ojos de Garza. Los vecinos han visto desde siempre cómo el agua golpea las fachadas de los inmuebles y la avenida marítima del barrio cuando la marea está demasiado alta y ahora esta situación plantea un verdadero problema: la plaza pública se está viendo amenazada.
La erosión de las rocas que componen la base del paseo por el contacto directo con el mar y la falta de mantenimiento en los últimos años está facilitando la filtración del agua salada bajo este espacio público, lo que podría suponer su hundimiento. El Ayuntamiento de Telde ha empezado a redactar un proyecto de rehabilitación y reforzamiento de la estructura que presentará a la Demarcación de Costas.
Por lo pronto, los concejales de Playas y Urbanismo, Jonay López y Héctor Suárez respectivamente, mantuvieron hace unos días una reunión con el nuevo jefe de la institución, Alberto Martín, para señalarle esta y otras situaciones similares de desperfectos en el litoral. «Desde la administración queremos realizar los arreglos necesarios en las playas municipales, pero necesitamos el permiso de Costas para efectuarlos», aclara López al respecto.
Otras actuaciones pendientes
El paseo marítimo del barrio costero de Tufia también sufre los mismos problemas que en Ojos de Garza y recuerda que hace poco fue vallado para impedir el tránsito de los vecinos y los visitantes, por lo que también han decidido plantear por escrito cuales son las actuaciones necesarias para su restauración. Entre otros puntos a destacar, el responsable político resalta además la necesidad de mejorar los accesos en las playas de San Borondón y Palos, las grandes desconocidas del municipio de Telde.
Solo algunas personas de la zona acostumbran a visitarlas para pasear con sus mascotas o para practicar algunos deportes como el surf, ya que la fuerte marea en esta área impide el baño habitual y la falta de recursos no hace tampoco muy cómoda la estancia. Sin embargo, existen planes para mejorar las condiciones de la cala. En concreto, está prevista la rehabilitación de los accesos de ambas y también actuaciones para solucionar los problemas de desgaste del gran dique de El Barranquillo, que en contacto con el mar se han producido grande agujeros a lo largo de toda su estructura.
Sobre esta situación debatieron con el jefe de la demarcación de Costas, que adelantó que desde su institución están planteando un proyecto para actuar directamente sobre este muro de grandes dimensiones. «Todavía no hemos precisado si deberíamos rehabilitarlo o directamente derrumbarlo, necesitamos valorar con más profundidad qué es lo mejor», añade.
El resto de actuaciones consistirán principalmente en la instalación de nuevas pasarelas adaptadas para personas con movilidad reducida en las playas de Salinetas y La Garita. «Adaptar la costa para que sea más accesible es uno de nuestros objetivos primordiales, así como el aumentar los recursos básicos como los puestos de socorrismo, los baños o las pérgolas para proporcionar sombra en todas las playas», explica el concejal. Finalmente asegura que también están trabajando para arreglar el paseo marítimo de La Garita, compuesto en algunos tramos por hileras de rocas que están levantándose y que pueden suponer un peligro para las personas que caminan por la zona.
De momento no está calculado que cuantía monetaria será precisa para llevar a cabo estas tareas. «Estamos redactando aún los proyectos, pero cuando estén finalizados lo primero que haremos será enviárselos a Costas para que valoren si es posible que efectuemos estas actuaciones y si la manera que nosotros plantemos es la correcta o no», explica el concejal.
Tras el encuentro con Martín considera que van por buen camino. «La reunión se convocó como toma de contacto, con el fin de acercar las dos instituciones, pero podemos decir que fue muy fructífera y vimos muy buena predisposición por su parte», considera el concejal de Playas.
López admite que en general las infraestructuras situadas en la costa del municipio han precisado en los últimos años de mantenimiento y adelanta que en los próximos años la partida presupuestaria del área estará centrada en garantizar estos cuidados para evitar que la erosión con el mar siga estropeándolas. Pero lo primero es lo primero, reforzar los espacios más perjudicados por el contacto con el agua y la brisa marina para evitar accidentes.
