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La danza cultural del garrote

Medio centenar de jugadores del palo exhiben sus mañas en la Casa Condal de San Juan

05-10-2022 TELDE. Jornadas del garrote. Reconocimiento a tres escuelas de juego del palo. | 05/10/2022 | Fotógrafo: Andrés Cruz Andrés Cruz

Telde cerró ayer las jornadas del juego del garrote tradicional con una demostración de las técnicas que persisten en Gran Canaria, gracias a escuelas como La Revoliá, La Barranquera y La Familia de Maestro Paquito Santana. También vinieron jugadores de Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura, todos unidos para que esta tradición de pastores sea reconocida Bien de Interés Cultural (BIC).

Impresiona ver a los jugadores buscarse las vueltas con un palo entre las manos. Primero se saludan en la distancia y, sin más contemplación que la complicidad del juego, se suceden los ataques y las defensas, siempre a los espacios libres del rival, siempre tratando de desarmarlo o de doblegarlo, sin golpes ni daño físico.

Así es el juego del palo canario o del garrote, que es como se denomina a esta práctica ancestral en Gran Canaria, donde se suele usar un palo más gordo y de mayor envergadura, similar al empleado en Fuerteventura, donde también se le denomina juego de la lata.

Todas estas consideraciones técnicas de modalidades y de estilos fueron expuestas ayer en la Casa Condal de Telde, donde representantes de las escuelas de Tenerife, Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria unieron sus varas para reivindicar que el popular juego canario sea reconocido Bien de Interés Cultural (BIC) inmaterial.

«Reconocen nuestro esfuerzo por salvar el juego del garrote», celebran las familias y clubes que lo practican

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Ese, al menos, es el objetivo de las jornadas organizadas por la Fundación para la Etnografía y el Desarrollo de la Artesanía Canaria (FEDAC), que ha contando con ponentes de la talla de Manuel Lobo, catedrático y ex rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), o de Javier Velasco, inspector de Patrimonio en el Cabildo.

Entre los actos más importantes, destaca el reconocimiento a las tres escuelas que enseñan el popular juego del palo en Gran Canaria: La Barranquera y La Familia de Maestro Paquito Santana, ambas de Telde, y La Revoliá, de Santa Lucía. «Esto representa el apoyo institucional a nuestros esfuerzos por salvar el juego del garrote reconociendo su carácter de BIC inmaterial», explica el presidente del club La Barranquera, Juan Ignacio Suárez, porque «no sólo lo arropamos en su contexto etnográfico, sino que lo incorporamos a las instituciones deportivo-culturales y lo intentamos visibilizar y promover en el ámbito educativo», añade el veterano jugador.

Una de las conclusiones de las jornadas, además de los «sólidos» valores culturales, históricos y deportivos del juego del palo, es la importancia de enseñarlo en los colegios. Por eso el Cabildo, a través de la FEDAC y de las tres escuelas existentes, comenzará a formar a los profesores que quieran llevar esta tradición a las aulas. Esta experiencia piloto, con el maestro Eliezer Medina Moreno a la cabeza del proyecto, empezará su andadura en Telde.

Pero volvamos al presente, al patio de la Casa Condal, donde los clubes del palo exhiben sus mañas ante medio centenar de espectadores y de participantes. Los de Tenerife, de la escuela del palo y de la mano Eduardo Oramas Alayón, dan la bienvenida a golpe de silbo gomero; estallan los primeros aplausos y comienzan las demostraciones con la vara corta, el palo medio y el garrote tradicional, que son las tres técnicas empleadas por los pastores de antaño, bien para defenderse o para desplazarse por los riscos.

Ahora no hay violencia ni competición, sólo destreza. Los jugadores paran el palo antes de darle al contrario, tal como antaño se enseñaba en las familias. Lo que importa es la habilidad, no ganar puntos o lesionar al contrario, sino «hacer juego», esto es, desarrollar las posibilidades técnicas que ofrece el garrote. Una danza de pies y manos que seduce con solo mirarla.

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