Los sindicatos en el Ayuntamiento de Telde, con el Cesif a la cabeza, volvieron a concentrarse ayer a la entrada de las oficinas para exigir mejoras, como el aumento de personal, los complementos o las retribuciones durante las bajas.

Esta nueva concentración, que es la segunda durante la semana, no ha sentado bien a la alcaldesa, Carmen Hernández, que arremete contra el Cesif por usar las movilizaciones como «estrategia para conseguir beneficios antes de las elecciones», al tiempo que los acusó de «faltar a la verdad» con las reclamaciones, romper la paz social y «atentar contra la imagen» de Telde ahora que ha logrado estabilidad financiera.

La concejal de Recursos Humanos, Celeste López, añade que se han realizado «numerosas acciones» para fortalecer el músculo administrativo y mejorar las condiciones laborales de los trabajadores. Considera López que las críticas del sindicato «no se ajustan a la verdad». Asegura la edil que las actas de las mesas de negociación, más de 50, se adoptaron con el consenso sindical, por lo que la nueva apostura es contraria a lo acordado.

La alcaldesa y la concejala recuerdan que no fue decisión de su gobierno suspender los acuerdos y pactos sobre los complementos, tal como expresa el escrito sindical remitido al Ayuntamiento, sino que fueron suspendidos en 2012 por el Plan de Ajuste y por mandato del Estado.

Añaden que la mesa de negociación acordó por unanimidad que el incremento del 2% aprobado por el Estado para el capítulo 1 para 2022 se destinara íntegramente a subir el suelo de forma lineal a todos los trabajadores, renunciando los sindicatos al plan social (ayudas para gafas, dentistas, planes de pensiones, ayudas al estudio…).

Tampoco justifica la protesta el cobro del 100 % durante la incapacidad, porque fue acordado en la mesa de negociación de octubre y está pendiente de aplicarse.