Drones al vuelo para acercar las matemáticas al alumnado

Los estudiantes del IES José Frugoni Pérez ponen a prueba sus conocimientos en geometría y escala utilizando estos dispositivos para calcular las medidas del parque San Gregorio

Benyara Machinea

Benyara Machinea

El instituto José Frugoni Pérez La Rocha pone rumbo al parque San Gregorio para aprender matemáticas de una forma diferente. Los alumnos de segundo de la ESO han podido aplicar los teoremas científicos que estudian en clase para tomar las medidas de los distintos espacios. No obstante, junto a las tradicionales cintas métricas también pudieron hacer uso de drones, que dieron pie a una dinámica jornada de aprendizaje.

Las clases de matemáticas, que parecen estar ligadas de forma irremediable a las cuatro paredes de un aula, supone para muchos alumnos una frustración que les desanima a la hora de plantearse un futuro en el mundo de las ciencias. Con el fin de romper con la dinámica y potenciar a su vez el aprendizaje, el instituto teldense José Frugoni Pérez La Rocha llevó ayer a 70 alumnos de 2º de la ESO al parque San Gregorio, donde pudieron comprobar de primera mano la utilidad que tienen en la vida real las lecciones que reciben en el centro. Para ello contaron con una serie de drones con los cuales han podido calcular las alturas y medidas del espacio

Desde primera hora de la mañana los estudiantes de 12 y 13 años se agrupaban en los distintos espacios de la zona para hacer sus estimaciones, que presentarán dentro de unos días a través de un trabajo y un vídeo explicativo. "Ya han visto de forma teórica cómo se aplican los teoremas, cómo calcular distancias o áreas geométricas de figuras, y ahora todos esos contenidos teóricos lo importante es materializarlos en la práctica porque al final ellos se quedan con las experiencias que viven. Si se lo estudian en clase y lo aplican en un examen está bien, pero luego lo terminan olvidando", explicó Alejandro Bolaños, uno de los profesores de matemáticas que les ayudó en la actividad. 

"Es importante para reforzar los contenidos porque los estudiantes se quedan con las experiencias que viven"

Los jóvenes utilizaron el Teorema de Tales para calcular la altura de las canastas, así como de las esculturas del parque, mientras que Pitágoras les permitió estimar las medidas de las gradas, calculando la hipotenusa para saber qué recorrido tenía que realizar el dron en el aire. "Me gusta la idea de llevar a cabo estas actividades fuera del colegio porque aquí te diviertes mucho más, estás con tus amigos y puedes estudiar al aire libre", incidió Sara Mendoza, una de las estudiantes que participó. 

Gracias a estas lecciones también afianzaron sus conocimientos sobre escalas a partir de calcular las distancias entre los distintos puntos del parque, pasando las medidas del plano a la realidad. Bolaños remarcó que "esta iniciativa va dirigida especialmente a que ellos vean la aplicación que tienen todos esos contenidos teóricos de matemáticas en la vida real. En un futuro, si ellos se dedican a una carrera de Arquitectura o de Topografía donde tienen que calcular alturas inaccesibles, podrán ver la utilidad que tiene todo esto para resolver problemas".

Los estudiantes tratan de calcular las medidas de una estatua del parque a partir de su sombra.

Los estudiantes tratan de calcular las medidas de una estatua del parque a partir de su sombra. / ANDRES CRUZ

La propuesta se enmarca dentro del proyecto de Espacios Creativos lanzado por la directiva del centro, que cuenta con distintos recursos cedidos por la Consejería de Educación como drones o cromas con los que aprenden haciendo uso de las nuevas tecnologías. "Estamos aplicando los drones al aula por primera vez y creo que es una experiencia muy enriquecedora mezclar las matemáticas, la física y otras ciencias con estas tecnologías de vanguardia que tantas aplicaciones tienen hoy en día", enfatizó el docente.

"Yo viendo estos contenidos en clase tenía muchas dudas, pero ahora el verlo aplicado en un contexto cercano me ha ayudado a terminar de entender todo", incidió por su parte el alumno Elihú Suárez. El centro ya ha manifestado su intención de continuar con este tipo de propuestas dentro del el proyecto STEAM, que se compone de las áreas de ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas. "Se trata de combinar esos conocimientos para fomentar en los alumnos, y sobre todo en las alumnas, esas carreras científicas", aclaró el profesor de matemáticas Gustavo Cruz.

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