Arqueología / Antropología

Machu Picchu habría sido un gran centro multicultural prehispánico

El ADN antiguo muestra que varios sirvientes o asistentes de la familia real inca o sus antepasados provenían de lugares remotos y con otra identidad cultural

Las técnicas para desvelar la información encriptada en el ADN antiguo han permitido descubrir un pasado multicultural en la ciudad inca de Machu Picchu.

Las técnicas para desvelar la información encriptada en el ADN antiguo han permitido descubrir un pasado multicultural en la ciudad inca de Machu Picchu. / Créditos: Felipe Lopez en Pixabay

Pablo Javier Piacente

Un nuevo estudio ha descubierto una increíble diversidad genética escondida dentro de los restos de personas que alguna vez habitaron Machu Picchu, la gran ciudad del imperio Inca que hoy es un atractivo turístico mundial en Perú. Al secuenciar el ADN antiguo de los restos de 68 individuos, 34 enterrados en Machu Picchu y 34 enterrados en Cusco, los investigadores hallaron similitudes genéticas con ancestros de diversas procedencias, incluso de regiones más distantes de América del Sur, y que habrían habitado la zona antes del dominio inca.

Un grupo internacional de investigadores, que incluye a científicos de la Universidad de Yale, en Estados Unidos, el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva, en Alemania, la Universidad Nacional de San Antonio Abad del Cusco (UNSAAC), en Perú, la Universidad de Adelaida, en Australia, y otros centros académicos ha publicado recientemente un nuevo estudio en la revista Science Advances en el que sostienen que Machu Picchu, la legendaria ciudad inca ubicada en la Cordillera Oriental del sur del Perú, fue en realidad una comunidad cosmopolita que agrupó a personas de diferentes orígenes.

Asistentes viajeros

Machu Picchu es quizás el sitio arqueológico más famoso del hemisferio occidental, que además se ha convertido en una “mina de oro” para el turismo peruano, atrayendo a miles de visitantes de todo el mundo año tras año. Sin embargo, todo indica que ese contacto multicultural provocado por la actividad turística ya estaba en la esencia de la ciudad inca: según los científicos, la llegada de personas con diferentes identidades culturales se habría concretado incluso desde antes del dominio inca en la región.

Se cree que Machu Picchu fue originalmente una propiedad real relacionada con el linaje de Pachacuti, el emperador al que se atribuye el establecimiento del imperio Inca. Los miembros de la realeza residían en estas haciendas por temporadas, pero un conjunto de sirvientes y asistentes, conocidos como yanaconas, cuidaban las instalaciones cuando la familia real se ausentaba. Los yanaconas, que eran traídos a la hacienda desde otras tierras conquistadas por los incas, eran privilegiados en comparación con la población en general.

Ahora, los investigadores generaron datos de ADN de 34 personas enterradas en Machu Picchu, que se cree que eran sirvientes o asistentes asignados para servir a la familia real inca, así como de 34 personas de Cusco, para comparar su información genética con la de los yanaconas. El análisis realizado y la aplicación de técnicas de estudio del ADN antiguo, que trabaja con muestras biológicas de gran antigüedad y que no han sido preservadas específicamente para su investigación, ha generado sorprendentes resultados.

Multicultural y cosmopolita, incluso desde antes de los incas

"Descubrimos que muchos de los criados eran de origen amazónico: alrededor de un tercio de ellos tienen ADN que refleja cantidades significativas de ascendencia amazónica, representando como mínimo dos zonas diferentes dentro de la región amazónica", indicó en una nota de prensa la investigadora Lucy Salazar, autora principal del nuevo estudio. Investigaciones previas habían encontrado restos de artefactos de cerámica en Machu Picchu que mostraban múltiples identidades culturales, ahora confirmadas desde la genética

Además, un porcentaje importante de los individuos tenían ascendencia mixta, a menudo de regiones distantes entre sí. Este dato sugiere que los pobladores de Machu Picchu establecieron parejas con representantes de otros grupos genéticos, produciendo una población diversa a partir de su descendencia. Esto difiere notablemente de las condiciones que se encuentran en las aldeas agrícolas, según los investigadores.

Al mismo tiempo, los científicos usaron la datación por carbono para fechar los restos y encontraron que algunas de estas personas fueron enterradas antes del surgimiento de Pachacuti y el imperio Inca, según escribió en The Conversation la científica Roberta Davidson, otra de las autoras de la investigación. En consecuencia, Machu Picchu ya habría comenzado a forjar su carácter cosmopolita y multicultural desde antes del dominio inca, que tuvo lugar entre los años 1438 y 1533 d. C.

Referencia

Insights into the genetic histories and lifeways of Machu Picchu’s occupants. Lucy Salazar, Lars Fehren-Schmitz, Roberta Davidson et al. Science Advances (2023). DOI:https://doi.org/10.1126/sciadv.adg3377