El esperado proyecto de Loro Parque para construir el parque acuático Siam Park en Gran Canaria no tiene perspectiva de poder ejecutarse en el medio plazo. El alto precio que piden los propietarios por sus terrenos en el sur de la Isla haría inviable la inversión, según explicó el director de Siam Park y vicepresidente de Loro Parque, Christoph Kiessling.

"Siempre hemos mirado a Gran Canaria con ojos enamorados pero cada vez que hemos venido no se han cumplido las expectativas ni las ilusiones", dijo Kiessling mostrando los documentos con las ofertas que han recibido de los propietarios de los terrenos y que han estado valorando estos días.

Pese a la delicada situación económica y del sector turístico Kiessling consideró que este podría ser un buen momento para desarrollar su inversión y generar "una nueva ilusión" en el desarrollo del sector turístico en la zona de Playa del Inglés, Maspalomas y Meloneras.

"Hoy para cualquier destino turístico es de máxima importancia tener oferta complementaria de ocio. Si hoy solamente llegas con el concepto de hotel y piscina poca cosa vas a poder hacer. Quien tiene esta oferta está mejor preparado para competir con otros destinos". "Nosotros estamos convencidos de que las Islas Canarias son el mejor destino del mundo. No hay otro con estas condiciones. Nosotros estamos al servicio del sector turístico en Canarias y creemos que debe apoyarse en productos de calidad", señaló.

En este sentido lamentó que los propietarios del suelo "sólo quieren ganar mucho dinero" y que "no han llegado a reconocer el valor que esta infraestructura puede dar a la planta alojativa y cómo puede contribuir a la revaloración del destino".

"Nunca me voy desanima- do y seguiremos intentándolo con cierto optimismo, pero no vamos a tirar la casa por la ventana. Nos encantaría si las condiciones fueran interesan-tes y comparables con lo que hemos pagado en Tenerife", dijo Kiessling.

Frente a los obstáculos en la adquisición de suelo, el vicepresidente de Loro Parque destacó el buen talante encontrado en la administración pública. "Los políticos están haciendo un esfuerzo destacable, tanto desde el Cabildo de Gran Canaria como desde el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana. Han demostrado mucha colaboración y muy buena disposición. Esta vez no es por falta de esfuerzo político. Hay que decir que han trabajado de una forma rápida y eficiente en cada momento y en cada nivel, y por ello hay que felicitarlos", subrayó.

El público canario es la otra gran asignatura pendiente. Loro Parque y Siam Park se caracterizan por tener más visitan-tes entre semana que los fines de semana, lo que pone de manifiesto que no son visitados por los residentes. "En Holan-da el 60 % de los visitantes de los parques son residentes", lamentó.

"Nosotros no tenemos mucho flujo de visitantes canarios. La realidad es que no llegamos ni al 10 % de la población canaria que nos visita", explicó. "Nuestra gran asignatura pendiente es que todos los canarios vengan a visitarnos".

El grancanario cumple más con el perfil de visitante de este tipo de infraestructuras de ocio que el tinerfeño. "Nosotros siempre hemos recibido mucha gente de Gran Canaria y, por ejemplo, en el año 1989, cuando se inauguró la zona de pingüinos en Loro Parque, tuvimos más visitas de residentes de Gran Canaria que de Tenerife", reveló Kiessling.

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Han pasado 40 años desde que aquel "loco alemán", el presidente de Loro Parque, Wolfgang Kiessling, eligiera un terreno relativamente pequeño, 13.000 metros cuadrados, con 120 loros, para ofrecer un show a los turistas. La idea de ocio en parques era en esos momentos muy novedosa, tanto que "nadie creía que la idea de hacer un parque con papagayos pudiera tener éxito a medio o largo plazo". "El turoperador de aquella época conocía excursiones como la vuelta a la Isla o la subida al Teide, pero no reconocía el potencial de un parque, por lo que había aún más dificultad para atraer a los turistas", por lo que los orígenes de uno de los principales atractivos turísticos de Tenerife fue de mucha "pelea".

La visión de Kiessling era la de "crear un parque lleno de loros hasta tener la colección de loros más grande del mundo". Pero cuando la policía de Puerto de la Cruz decidió confiscar los chimpancés que se usaban como reclamo en la Avenida Marítima y Kiessling se hizo cargo de ellos para que no los sacrificaran, se abrió la puerta a que Loro Parque se convirtiera en lo que es hoy, una de las instituciones zoológicas más respetadas y reconocidas del mundo.

El amor y respeto que se brinda a las distintas especies es sello de identidad de la institución. "El afán por dar el mejor entorno posible a los animales ha guiado el camino hacia la excelencia y ha marcado la diferencia con otros zoológicos".

La filosofía del respeto al entorno ha inspirado también la gestión de los dos parques. "No se puede ser un amante de los animales y al mismo tiempo contaminar el entorno", sostuvo Kiessling. Estos principios han inspirado también la creación de Loro Parque Fundación, que defiende proyectos de investigación, de educación, de protección, etcétera.

"Si ves fotos de satélite sobre cómo estaba el planeta hace 20 años y como está hoy reconoces una situación de máxima gravedad. Hay que hacer algo. Esto a mi padre le importa muchísimo y por eso puso en funcionamiento las actividades de la Fundación", explicó.