El cambio en la titularidad en el contrato de explotación turística de los apartamentos Los Ficus de Playa del Inglés tuvo que haberse realizado el pasado uno de noviembre. Sin embargo, la empresa Bordón Complex se niega a abandonar las instalaciones si no hay una sentencia que le obligue al cese de su actividad. Los propietarios pierden más de 3.500 euros en la primera semana del conflicto.

"Soy consciente de que en cierta manera mi contrato de explotación turística en los apartamentos está caduco, pero yo no me iré hasta que haya una sentencia que me lo exija por escrito", así de rotundo se mostró ayer Juan Bordón a los pies del establecimiento extrahotelero Los Ficus, que explota bajo la entidad Bordón Complex desde hace una década.

La sentencia que espera Bordón, sin embargo, poco tiene que ver con la finalización del contrato de explotación del complejo ya que, según los propietarios, responde a una demanda que la comunidad le interpuso el año pasado por rentas pendientes de pago.

"Bordón hace tres años que no paga ni los gastos de comunidad de los apartamentos de los que es propietario ni las rentas mensuales correspondientes a la explotación del complejo", denunció Juan Lorenzo Alonso, vocal de la comunidad de propietarios, mientras rebuscaba entre sus documentos dicha denuncia.

Hasta el 31 de octubre, Bordón ejercía de explotador del complejo con una cuota cercana a 450 euros al mes durante los meses de invierno, "ya que en verano, Bordón alegaba que por ser temporada baja no debía abonar el canon", apuntó indignado el propietario Ignacio Castañeda, quien lleva días intentando recuperar su apartamento ante esta situación de arrendamiento irregular.

Ahora, con la entrada en vigor del contrato que los propietarios han firmado con la empresa G&G hasta 2016, la nueva entidad casi duplicará la renta mensual por explotar la infraestructura. "En temporada alta G&G pagará un canon de 630 euros mensuales y en verano, 320", matizó Lorenzo. Por su parte, Bordón justificó el pago de esas supuestas deudas económicas, "mediante una inversión en la renovación de las instalaciones de los apartamentos". "En una junta de propietarios se acordó que los costes derivados de la rehabilitación y mantenimiento del edificio cubrían las rentas pendientes de pago, así que desde mi punto de vista mis cuentas están saldadas", explicó Bordón.

Ante este limbo administrativo, los propietarios señalan que en esta primera semana de noviembre han perdido más de 3.500 euros, ya que se topan con la imposibilidad de poder arrendarlos a turistas hasta que se produzca el cambio de titularidad en el contrato. "Este sábado tuvimos que derivar a 28 visitantes a otros apartamentos", puntualizó Lorenzo, quien añadió: "El conflicto nos puede ocasionar pérdidas de 12.000 euros al mes".

De los 45 apartamentos que conforman el complejo Los Ficus, 16 son propiedad de Bordón. Una cifra que no llega al 51% de la infraestructura, tal y como exige la Ley Turística para permitir la explotación del recinto a un propietario. "Este señor no llega ni al 40% de la titularidad del edificio, por lo tanto, está infringiendo la ley", agregó Carmelo Cabrera, propietario desde hace 40 años en Los Ficus, quien aseguró que las sanciones por este tipo de acciones ilegales oscilan los 10.000 euros.

Uno de los propietarios afectados cambió ayer la cerradura de su apartamento para impedir así que Bordón continúe con el arrendamiento ilegal del espacio.