La llegada del invierno hace que los destinos con temperaturas suaves se conviertan en grandes atractivos para una escapada. Canarias el primero.

Pasar en Canarias el invierno es uno de los planes más apetecibles debido, sobre todo, al fantástico clima, factor al que se le suma ahora la garantía de seguridad.

La llegada del invierno hace que los destinos con temperaturas suaves se conviertan en grandes atractivos para una escapada. Si a ello se añaden garantías de seguridad frente a la covid-19, la fórmula tiene como resultado Canarias.

Que Alemania y Reino Unido hayan hecho de las islas Canarias el primer destino ‘seguro’ para levantar el veto sanitario es una gran muestra de la capacidad de este destino para resolver la primera gran cuestión de cualquier viajero en época pandémica.

Canarias es una de las comunidades españolas con la menor incidencia de la covid-19 a siete días. El sector turístico ha trabajado con esfuerzo para garantizar protocolos de seguridad. No en vano, la Organización Mundial del Turismo (OMT) eligió a Canarias como el primer destino seguro con pasaporte sanitario digital.

Y si la seguridad es asunto prioritario, ¿qué otros atractivos hacen de Canarias un destino perfecto para desconectar con la llegada del frío a la península? Un invierno… con temperaturas de primavera.

Uno de los baluartes de Canarias a la hora de ser destino predilecto de todo tipo de viajeros es su clima suave: las temperaturas son templadas todo el año, en torno a 20ºC. La escasez de lluvias y las 3.000 horas de sol anuales que ofrecen las islas hacen que se pueda disfrutar de un sinfín de planes al aire libre, otra de las garantías de seguridad en tiempos de covid.

Canarias, destino seguro

Más allá del sol y la playa, Canarias como destino turístico ofrece un amplísimo abanico de ocio seguro. Las visitas culturales con aforos reducidos y medidas de control en los accesos son una realidad que permite conocer museos y monumentos con tranquilidad y sosiego. A ello se le suman planes gastronómicos en restaurantes y establecimientos hosteleros que se han adaptado con excelencia a la nueva realidad pandémica. Pasar el mayor tiempo posible al aire libre o en espacios abiertos es uno de los reclamos de los viajeros para prevenir contagios.

Y si algo ofrecen las islas Canarias es una naturaleza digna de contemplación y disfrute: extensiones selváticas como el Parque Nacional de Garajonay, en La Gomera, o el bosque de Tilos, en La Palma; paisajes desérticos al borde del mar, como el Parque Natural de las Dunas de Corralejo, en Fuerteventura, o la famosísima playa de Maspalomas, en Gran Canaria; los míticos lugares volcánicos como el Parque Nacional de Timanfaya, en Lanzarote, o el Teide, en Tenerife, el pico más alto de España. Y todo ello sin olvidar miradores desde los que disfrutar de paisajes de cuento y puestas de sol que llenarán las retinas tanto como el alma.

Contar con temperaturas suaves, mar y grandes espacios naturales hacen que los amantes del deporte puedan recrearse en cualquier rincón de las islas Canarias. Desde rutas ciclistas hasta submarinismo o windsurf, pasando por distintas propuestas para senderistas de todos los niveles son sólo algunas de las propuestas para ejercitar el cuerpo mientras se descubre un destino de cine. Y, tras una buena jornada de deporte, nada como relajarse en uno de los numerosos spas y balnearios que ofrecen las distintas islas de Canarias.

Talasoterapia, vinoterapia o aloeterapia son sólo algunas de las propuestas de bienestar.