La venganza del señalado. Araujo regresó a la primera línea de combate con una actuación convincente en la faceta de lucha y presión. El placer de volver a brillar como una estrella. Divorciado con el gol en esta campaña, su estrategia se fundamentó en ganarse el favor de la grada, conquistar el corazón de los fieles amarillos desde el sudor.

Más generoso sin balón que de costumbre, el dorsal 10 de la UD dejó atrás la era de las tinieblas con un tanto de tiro cruzado en el inicio del segundo tiempo para poner el punto y final a su particular infierno. Araujo vuelve a ser Araujo. 51 minutos separan el cielo del infierno. El tiempo que tardó el ejecutor en batir a Rulli y mirar a los ojos a la grada. Una celebración desde la rabia para sepultar el torrente de incógnitas. Una asistencia de oro de Tana fue el atajo endiablado para dejar liquidado el encuentro con el 2-0 -el anterior se remonta a la tercera jornada ante el Celta en Balaídos-.

Es la crónica de la resurrección. Paso a paso, fotograma a fotograma para abrir las puertas del cielo, Araujo se ganó el pan desde la primera centésima de segundo. El ariete bajo sospecha dio un golpe sobre la mesa y completó su encuentro más completo de amarillo en la máxima categoría.

Pichichi de la UD en la pasada edición liguera con 25 tantos, y solo tres días después de sus declaraciones -en las que fijaba su meta en 5 goles para encender al sector más crítico de la grada-. El Chino precisaba de este baño de masas. En los segundos previos al gran pulso de fuego, en megafonía sonó su nombre. Y estalló la grada, un clamor: pitos y más pitos. El argentino acarició el primer esférico y de nuevo fue increpado. Todos contra el pistolero. Tenía cuentas pendientes.

Los mosqueteros de Setién

En el minuto 4, el punta completó un movimiento de cintura que dejó por los suelos a Íñigo Martínez. Una combinación de caviar: Simón, El Zhar, Viera y Vicente de cabeza dejaron el balón al mediapunta de La Feria. El genio amarillo logró el primero y en parte le quitó presión a Araujo en su particular calvario. De nuevo un control milemétrico del argentino dejó por los suelos a los centrales de la Real, y el remate de Viera se marchó por centímetros. El frente ofensivo Araujo-Tana-Viera, los tres mosqueteros de Setién estaban dejando su huella estética barroca. En esa operación contra el gigante, la UD alcanzó el éxtasis.

Tres tiros, dos entre los tres palos con el 1-0 como tesoro. La UD iniciaba el segundo acto con más personalidad y Tana se presentó al panorama nacional con un pase exquisito. Sello Valerón. Y Araujo fusiló a Rulli en la acción del encuentro. De villano a héroe. Un tanto de killer para brindárselo a los mismos que le habían pitado en el fotograma uno.

Era el 2-0, que permitía a los amarillos diseñar la defensa más despiadada. Los pupilos de Setién se afianzaron en el jardín de Varas y salieron a la contra con una velocidad supersónica. Tuvo que cambiar el registro Araujo, que se quedó como ancla hasta que en el 74 dejaba el terreno de juego y el Gran Canaria se ponía en pie. Un volcán de aplausos para el nueve de la polémica: en su semana, el Chino recuperó su ADN inmortal para confirmar a los cuatro vientos que es el superhéroe. La vida puede cambiar en 75 minutos, de héroe a villano. Es la película de Araujo, una superproducción de Hollywood. El estilete regresa a lo grande para desatar el pánico en las zagas enemigas. Así se entierra una crisis en la liga de las estrellas. Un remate a portería y el segundo tanto en esta campaña de altibajos (ha disputado un total de 831'). Brindó 14 pases y fue la tumba de Moyes. Arde San Sebastián gracias a la pegada de acero del pistolero amarillo. La sociedad con Viera, Tana y Vicente dará mucho que hablar. Vuelve el rey para poner fin a la dictadura de las dudas.

Cuestión de confianza

Con el desarrollo de los minutos, Araujo se fue sintiendo más firme. Ofreciendo un recital de desmarques y movilidad. El cartel de jugador fuera de forma había saltado por los aires. Por momentos, había regresado la versión perfecta, las más eficaz de un delantero llamado a convertirse en el emperador de los amarillos.

Los centrales de la Real sufrieron con el toque diabólico del pistolero argentino. Un canto a la esperanza, la UD recupera a su delantero en el momento justo de la temporada. "Que meta más de cinco goles; al menos lo vamos a intentar", determinaba Setién bajo una enorme sonrisa. Araujo ya tiene dos, y fue aclamado por el volcán amarillo del Estadio de Gran Canaria. Es el monarca de pólvora.