El Sevilla muere por Roque Mesa. El jugador de la UD Las Palmas es la primera y casi única opción para reforzar el centro del campo del club hispalense y volverá a la carga para hacerse con sus servicios. El lunes hizo, en forma de llamada telefónica de Monchi a Miguel Ángel Ramírez, un primer acercamiento de seis millones de euros que fue rechazado de manera inmediata por la entidad insular. Y ayer tuvo lugar una reunión en Madrid entre el propio Monchi y el representante del jugador, Luis Alonso, en la que se acordaron los términos del contrato que tendría el teldense si los clubes llegan a un acuerdo.
La oferta, hasta el 2020, es el contrato de la vida de Roque pues supone un incremento notable de sus emolumentos. Con 27 años se encuentra ante un tren que podría no volver. El centrocampista, que aterrizó ayer en la Isla tras su periplo de vacaciones en Cerdeña, ha dado el sí al Sevilla y espera acontecimientos. La entidad hispalense realizará una nueva oferta a la UD Las Palmas en las próximas horas. Y el modus operandi de la dirección deportiva del Sevilla es muy claro en estos casos. Con Monchi al mando el club hispalense actúa por la vía rápida y salvo en contadas excepciones no le gusta estirar demasiado cualquier negociación. Su agenda es amplia y, aunque Roque es su prioridad, como demuestra su insistencia en las últimas horas y el interés que han tenido en él desde antes del final de temporada, una nueva oferta rechazada de la UD Las Palmas provocaría que cambiaran de objetivo.
Un dilema para la UD
En el club insular conocen perfectamente que en estas situaciones el Sevilla no se anda por las ramas y una nueva oferta pone en aprietos a la entidad del Estadio de Gran Canaria. Rechazarla de golpe supondría alejar la posibilidad de realizar un muy buen negocio. En un principio pedían diez millones de euros pero esa frontera es revisable, por lo que la operación se podría cerrar en unos 8 millones de euros.
En la entidad también tienen en cuenta la profesionalidad en todos estos años del jugador, que esperó con mucha paciencia por una oportunidad en el primer equipo a pesar de que su rendimiento en el filial era para más reconocimientos. Y cuando le llegó el momento y empezó a destacar no reclamó que le mejoraran el contrato.
Con todo, el capítulo del traspaso de Roque Mesa se encuentra en sus horas más calientes. El teldense ya está de vuelta en la Isla y guarda silencio. No quiere hacer declaraciones ya que su intención es que, ocurra lo que ocurra con la negociación entre clubes, mantener las buenas formas con la UD Las Palmas y no presionar.
Para Quique Setién y toda la afición supondría una gran pérdida ya que se convirtió en el estandarte del centro del campo en la segunda vuelta de la competición, que coincidió con el mejor momento de la temporada del conjunto insular. Ha acabado la temporada como el jugador que más recuperaciones ha realizado en Liga y fue indispensable protegiendo la espalda de Tana y Jonathan Viera, rol que apenas había ocupado a lo largo de su carrera.
Su polivalencia, capaz de jugar de pivote defensivo, de mediocentro en un doble pivote, de interior derecho y hasta de lateral y de extremo derecho es también muy valorada por el Sevilla.
En esa demarcación la UD Las Palmas cuenta con varios futbolistas de nivel que mantendrían en la plantilla un nivel competitivo alto con Javi Castellano, Vicente Gómez, Hernán Santana y Ángel Montoro, punto que también tienen en cuenta en la entidad insular. Además, la más que probable marcha de Willian José provoca que la UD Las Palmas pueda replantearse su política de fichajes para este verano.
Y es que encontrar un delantero centro que garantice goles sin gastarse un euro es una misión prácticamente imposible. Ante eso, el club tiene dos opciones: buscar otro jugador cedido o rascarse el bolsillo, posibilidad para la que ingresar casi diez millones de euros por la venta de Roque sería de gran ayuda.
