La continuidad de Quique Setién como entrenador de la UD Las Palmas está cada vez más lejana. Desde que el cántabro realizara a comienzos de enero una propuesta de tres temporadas, una serie de peticiones en materia de responsabilidades internas y un salario superior a los dos millones de euros por año -cantidad en la que se incluye lo que percibirían dos de sus ayudantes-, la entidad insular no ha respondido. El club, que comenzó la negociación en diciembre con una oferta de una temporada y un aumento de sueldo, ha hecho oídos sordos a la proposición del cántabro y ha optado por dejar pasar el tiempo. Los acontecimientos decidirían la postura de la entidad en la negociación y éstos, de momento, no invitan a empujar a la UD a subir su oferta inicial.

Los resultados del equipo, que encadena cuatro derrotas consecutivas, hacen que el club prefiera seguir esperando. Y el tiempo juega en contra de la relación de la entidad con el técnico, que ha admitido en varias ocasiones que tiene un plazo a partir del cual empezaría a negociar con otros.

Ese vínculo entre ambas partes, muy fuerte hasta hace unos meses, se deteriora cada vez más. El técnico ha perdido varios apoyos dentro de la entidad, incluido el de un sector del vestuario. Las heridas abiertas tras sus declaraciones sobre lo sucedido en Madrid no se han cerrado del todo a pesar de que el equipo mantenga una buena línea de trabajo día a día e incluso en los partidos, por mucho que los resultados le den la espalda.

Quien no le rechaza es la afición. La parroquia se volvió a pronunciar a favor del entrenador el viernes pese a la cuarta derrota consecutiva y coreó de nuevo "¡Quique quédate!". Pero esa situación no decanta la balanza en la entidad, que hace poco más de un año llegó a destituir a Paco Herrera a pesar del favor del público, un cambio de rumbo que acabó resultado todo un éxito.

"La pelota está en el campo del club, yo estoy esperando a que me llegue la pelota para devolverla, sin más", resumió el técnico el jueves en su última declaración al respecto. Sus palabras en rueda de prensa son uno de los motivos que le han hecho perder apoyos en la entidad con el paso de los meses. Sus mensajes a los "resultadistas" en la última semana tampoco son bien vistos.

Con todo ello, se antojan unas jornadas clave para conocer el desenlace. Las citas ante el Real Madrid y, sobre todo, Osasuna serán muy importantes para conocer el futuro de Setién en la UD.