Sin piedad para el ejecutor de hielo. El Comité de Apelación de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) acordó ayer en Madrid desestimar el recurso presentado por el equipo jurídico de la UD y mantiene los cinco partidos impuestos por Competición al punta croata Marko Livaja. El documento presentado por el servicio jurídico alegó que el atacante se limitó a explicarle al árbitro andaluz Munuera Montero su versión de la entrada sobre Marcos Llorente [jugador del Deportivo Alavés, el pasado 25 de abril]. Por la acción vio la roja y luego le tocó en el hombro. El juez reflejó en el acta que fue un "empujón". Tras cumplir en Butarque un partido, el pasado miércoles, le restan cuatro y dice adiós a la 2016-17.

El acta detalla que fue expulsado por 'dar una patada a un adversario, estando el balón en juego, con el uso de fuerza excesiva. Una vez expulsado, me lanzó un empujón sobre mi hombro izquierdo'.

Al duelo por conducta violenta, que cumplió ante el Leganés, cabe añadir la imposición de una multa de 350 euros a la UD y 600 euros a Livaja, en aplicación de los artículos 123.1 y 52 del Código Disciplinario de la RFEF.

En relación al supuesto 'empujón', Livaja lo desmintió a este medio. "Solo le puse la mano encima, quería preguntarle las razones por las que me mostraba la roja". Apelación insiste que es 'una infracción del artículo 96, con multa accesoria en cuantía de 1.400 euros a la UD y 3.005 euros' al ejecutor de hielo. Cumple la pena ante el Atlético, Sporting, Barça y Sporting. Con siete goles (cinco en Liga y dos en Copa) en 1.537', no hay piedad para el pistolero de la galaxia.