La maldición eterna. El llanto del escudo. ¿Por qué tanto castigo? Todavía se podía caer más bajo. En Segunda y tras encadenar 91 días sin un triunfo que llevarse a la boca, la UD de Jémez se empeña en coleccionar esperpentos. En el silencio más vergonzante -la asistencia alcanzó los 4.624 fieles según un diagnóstico altamante optimista- y sin jugadores grancanarios de inicio, el cuadro isleño estira su depresión en la liga del caviar y sucumbe de la manera más abominable (0-1).

En el 88´, tras un error de Javi Castellano, presionado por Gaku, el balón llegó al ariete tinerfeño Ángel Rodríguez para fusilar al meta Chichizola. Disparo seco. La misma película de los últimos cinco meses. Falta de mordiente en el área enemiga -Gálvez estrelló dos balones en el poste- y el mismo espíritu solidario con el enemigo en tu jardín. Pecar en las áreas forma parte del dogma amarillo. Por eso late penúltimo, por eso suma la vergonzante cifra de 23 tantos tras 36 jornadas [3.240 minutos de agonía]. "Valoren nuestro compromiso", insiste Jémez en rueda de prensa.

En esta cruzada por la dignidad, la UD sigue sin dar la nota mínima. Ante un rival mermado -diez bajas-, se resiste un trozo de gloria. Sin merecerlo, en un pulso apático, los madrileños, con Rémy, conquistaron un botín excesivo.

Con un 68,7% de posesión y 21 remates -cuatro a portería-, la UD coqueteó con el gol de forma constante. Pero sin fe. Nueve saques de esquina y ocho faltas -por las 28 de los azulones, maestros en la marrullería-. La ´jugada´ de colar a Rémy, cedido por la UD hasta junio, de forma sorpresiva (falseando la relación de convocados), decora el jardín de las mediocridades. Con la autorización de la entidad amarilla, el delantero galo se plantó en el Gran Canaria y de titular. Conocido su pulso con Jémez, podía pasar cualquier cosa. Se marchó sin marcar (duró una hora) y ovacionado.

Política de cantera de Nigeria

En este viaje hacia ninguna parte -ya encadena Jémez 14 partidos sin ganar-, la UD salió sin un grancanario en el once. Etebo y Ezekiel actuaron de inicio. Los refuerzos de Nigeria que llegaron en enero.

El cuadro isleño salió con firmeza. Directa al cuello de Bordalás. Halilovic jugó en la zona central del ataque, ejerciendo de Viera, y disparó su implicación. En los costados: Gil y Ezekiel. Figuras de cartón y sin desborde alguno. Por detrás, Aquilani y Peter Etebo. El italiano fue el único exponente de coherencia, en este despertar atropellado, con seis grancanarios en el banquillo.

En el 9´, primer aviso de Gálvez a la madera. En el 15´, misil de Halilovic que tocó en el zaguero Djené. Contra de Amath y disparo lejano de Ángel Rodríguez. El tinerfeño fue el único canario de inicio de los 22 gladiadores en la escenificación del partido del bostezo. Gradas vacías, una UD frustrada y el Geta esperando su oportunidad. Llegaría en el 88.

De Wakaso a Loïc

Con Halilovic como único príncipe liberado de los grilletes del drama, su inspiración abrió una puerta. Pero duró 25 minutos. Todas sus aventuras terminaba en la nada. Le sobra un regate. Le sobra una mala elección. En el 38´, un centro con veneno de Gil tocó en un defensa y fue abortado por Guaita de forma agónica. Y en el 42´, la más clara del primera acto. Nacho Gil, sin oposición, en el corazón del área, hizo lo más difícil. Mandar el balón lejos de la portería. Llegó el descanso. Nada reseñable de un Getafe que mira a Europa. La payasada de Bordalás de esconder a Rémy no surtió efecto.

Sin cambios, la UD estiró su dominio inerte.Gálvez sumó su segundo palo. Lo del zaguero andaluz -al que le anularon un tanto legal ante el Sevilla- es producto de la magia negra. Entre los palos y el trágico destino. No hay manera de marcar. En el 61´, Jémez trató de darle otro giro al partido. Retiró a Aquilani y apostó por Javi Castellano de timonero. Además, mandó a la ducha a Ezekiel y apostó por Erik Expósito.

En el siguiente fotograma, ovación para Rémy. Igual que la que tuvo Wakaso, cuando el Alavés se dio un festín en el partenón de Siete Palmas y mandó a la UD al infierno de plata hace dos semanas. Flores al enemigo, condena al amarillo. A la hora de retirar a Gil, lluvia de pitos. También para Jairo, que trató de convertirse en el revulsivo.

Pero despertó el Geta. Jorge Molina (78´) y Ángel (81´) acariciaron el 0-1. El tinerfeño estrelló el balón en el larguero y Portillo fue derribado por Chichizola en el área. No se decretó pena máxima. Comenzaban los madrileños a sumar méritos. Ante Guaita, lo intentó Jairo -paradón del meta visitante- y Calleri, que mandó el balón al lateral de la red. Blanditos y sin un gramo de malicia. Desfallecer ante el infortunio, el deporte nacional de un vestuario sentenciado, superado por los disparates de la estructura.

Pólvora tinerfeña

El dominio de la UD de la primera hora fue la partitura de la mentira. Al menos, sirvió para narcotizar a una grada hundida en la miseria. Volaron las pancartas -´Menos limosnas y más dimisiones´- y se escuchó el llanto del escudo. A Segunda sin honor, sin puntería, sin canarios y sin ADN. La UD ha saltado por los aires en un proceso bíblico de autodestrucción. En el 88´, ante la presión de Gaku, ex del Tenerife, a Javi Castellano le temblaron las piernas.

El robo fue la antesala del horror. Balón para el artillero chicharrero Ángel Rodríguez, que supera de forma incontestable la figura de Chichizola. 0-1, la undécima derrota de Jémez, en 18 jornadas -solo dos victorias, con cinco empates, 10 goles a favor y 32 en contra-. Llegó un arrebato de furia, lo más digno que se vio en el césped, y tres disparos forzaron a intervenir a Guaita.

La UD lo intentó, es cierto, y mereció algún consuelo pero termina seducida por las garras del diablo. Bajo el silencio y la resignación de los 4.000 héroes, los amarillos se superaron. Siguen empecinados en arruinar la vida del escudo.

La victoria del orgullo no llega, van tres meses de abandono en el desierto. ¿Qué le queda al abonado? Solo quedan dos jornadas para el final de este calvario, la única nota alentadora de una temporada que conviene tener muy presente. El mayor desastre de planificación deportiva es un tsunami diabólico. Arrasa con todo. De la UD, ya no queda nada. Ni el escudo.

Ficha técnica:

0. Las Palmas: Chichizola; Míchel Macedo, Gálvez, Ximo Navarro, Aguirregaray; Halilovic, Etebo, Aguilani (Javi Castellano, min. 61), Nacho Gil (Jairo, min. 71); Ezekiel (Erik Expósito, min. 61) y Calleri.

1. Getafe: Guaitia; Alberto, Djené, Alba (Miguel Ángel, min. 62), Antunes; Portillo, Gaku Shibasaki, Barri, Amath (Merveil, min. 78); Rémy (Jorge Molina, min. 63) y Ángel.

Gol: 0-1, min. 88: Ángel.

Árbitro: Alberto Undiano Mallenco (Comité Navarro). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores visitantes Rémy (min. 44) y Merveil (min. 85).

Incidencias: partido de la trigésima sexta jornada de LaLiga Santander, disputado en el Estadio de Gran Canaria ante 4.624 espectadores.