La última ampliación de capital de la UD Las Palmas termina hoy y sólo se cubrirán unos 13.000 euros de un total de 1,06 millones, según estimaciones del club. Eso significa que sólo se habrán comprado unas 140 acciones de una suma de 11.292 que salieron a la venta hace un mes, el 15 de mayo. En cualquier caso, se trata de una incremento con respecto a la del año pasado, cuando la entidad sacó a la venta el mismo número de participaciones y sólo dos personas compraron seis.
Sin embargo, ese aumento no satisface del todo al colectivo Faro Amarillo, que pretende promover la compra de títulos por parte de aficionados con el objetivo de "socializar" el club. "Nosotros esperábamos que hubiera más gente que comprara acciones, ya que la temporada que viene no hay que pagar el abono. Habría estado bien que la gente hubiera dado un paso adelante, porque una gran parte de la afición pide que el club tiene que ser más social", lamenta Ayoze Marrero, uno de los portavoces.
"Si tienes la oportunidad de que el club sea más social y no la aprovechas, es una decepción como aficionado de la UD Las Palmas. Ahora bien, como miembro del colectivo le digo que en la última ampliación de capital sólo se compraron seis acciones y ahora se han comprado muchas más, aunque no son todas las que desearíamos", añade.
La mayoría de esos aproximadamente 140 valores los compraron miembros de Faro Amarillo y de la Federación de Peñas, que también se ha unido al intento de "acercar más el club a la afición". Aunque su mensaje no ha calado profundo, puesto que poca gente ha acudido a la ampliación de capital, se felicitan por el aumento.
Toda vez que el aumento propuesto por el club no se ha completado, el presidente Miguel Ángel Ramírez cubrirá el resto, por lo que, una vez lo haga, será poseedor de casi un 80 por ciento de las 41.404 acciones de que dispone el club. De ellas, más de la mitad -22.584- salen de las dos últimas ampliaciones -en dos años- que han sido cubiertas por el máximo mandatorio por algo más de un millón de euros cada una.
"Teníamos una opción enorme. No se puede pedir y luego no hacer nada". "Una de las cosas que promovíamos es que, ya que no tienes que comprarte el abono, era invertir en la compra de acciones el dinero que te vas ahorrar en el abono. Ese es mi caso. Yo pagaba 450 euros por un abono en la Grada Sur y lo que he hecho es comprar cinco acciones", confiesa Marrero.
Sea como fuere, Miguel Ángel Ramírez, que asegura haber rechazado dos ofertas de compra de 150 millones de euros cada una, en sólo dos años ha aumentado sus acciones en un casi un 50%.
