Toni Otero, secretario técnico de la UD Las Palmas, reivindicó su papel y el del entrenador Manolo Jiménez a la hora de realizar los fichajes para la próxima temporada. De esa forma, rechazó que la incorporación de Deivid Rodríguez estuviera cerrada desde hace meses, aunque dejó caer que las negociaciones empezaron antes de su llegada.

"Todas las contrataciones que se están haciendo tienen el consentimiento tanto de Manolo como el mío. Es posible que las negociaciones se hayan abierto en un determinado momento, equis, pero todas llevan al final el sello de Manolo y mío. Tanto él como yo estamos contentos con la incorporación -de Deivid- y creemos que puede aportar mucho a este proyecto", aseguró Otero.

El futbolista, por su parte, quiso dejar claro que su vínculo familiar con Miguel Ángel Ramírez no tiene nada que ver con su regreso a la entidad amarilla. "Sé que se me relaciona con el presi. Todos sabemos que es mi suegro. Deivid llegó aquí hace unos cuantos años teniendo simplemente cinco ratos en Primera División y ahora tengo más de 20 partidos en Primera y más de 150 en Segunda. En todos los equipos que he estado siempre he sido titular y capitán o uno de los capitanes, y en ellos ni el entrenador ni el presidente eran familiares míos. Algo bueno tendré para conseguir eso", resaltó el grancanario.

"Estoy preparado para los palos cuando pasen cosas, porque se me va a relacionar con ellos. Sé que va a pasar. Llevo un par de semanas metiéndomelo en la cabeza y tengo la personalidad suficiente para aguantar eso", añadió al respecto el central.

Por otro lado, el secretario técnico amarillo echó un capote al jugador. "Es un chico de la casa que tiene una espinita clavada con el club y con la afición y todo el mundo merece una segunda oportunidad. En la vida hay que tomar decisiones y en su caso fue una situación muy complicada. Yo siempre lo digo: cada decisión que tomamos en la vida tiene consecuencias. Vamos a darle la oportunidad de quitarse esa espinita", comentó.

Con respecto a la confección de la plantilla, Otero recordó que actúa desde la "calma" y la "tranquilidad". "Quedan dos meses de mercado por delante. Nos gustaría incorporar jugadores lo antes posible y que el míster tuviera el equipo cerrado cuanto antes, pero aparecerán oportunidades de mercado que ahora no están y que a lo mejor dentro de un mes sí. Hay que tener la paciencia para hacer las cosas en el momento justo. Precipitarse no ayuda a nada", concluyó.