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Pretemporada / La contracrónica

El malabarista Vicente Gómez deja su firma

La genialidad del centrocampista reabre el debate sobre su papel con Jiménez

Vicente Gómez, ayer, tras marcar el primer tanto de la UD, de tacón en el Municipal de Maspalomas. Juan Castro

En la hacienda de Jiménez, el renacentista Vicente Gómez -242 partidos, ocho temporadas y la jerarquía de ser uno de los capitanes- busca sitio. El nuevo preparador de la Vicente GómezUDLo anuncia a los cuatros vientos. Llega el fin de la poesía. "En el AEK fuimos campeones, tras encajar solo doce goles. La 'portería a cero te da campeonatos", aseguró el estratega sevillano a su llegada al Don Gregory, hace una semana. Fue toda una declaración de principios. ¿Encaja un mimbre de Armani como Vicente en ese 4-4-2 industrial?

Ayer, en su primer partido de pretemporada con la batuta del costalero Jiménez -en Tunte no jugó el '4' por precaución-, Vicente jugó de inicio ante el filial escoltado por Javi Castellano. Momo y Benito Ramírez volaban en los costados,con Sergio Araujo y Espiau en la punta.

Javi, Fabio, Josemi, Cala...

Dos pivotes, dos referentes y dos artilleros. El Chino goza de plena libertad, como ya lució en el bolo del más allá de Tunte. Con las cartas sobre la mesa, estalla el enigma. ¿Qué protagonismo tendrá el '4' de la UD? Con menos posesión -Jiménez recalca salir en velocidad al contragolpe y trata de potenciar el remate de la forma que sea-, Vicente se suma al ataque con elegancia e instinto.

Un centro de Benito fue rematado de tacón de forma magistral en el corazón del área por el zurdo de Schamann. Tanto de bandera ante la vela chica. Destreza, pasión y una arista voluntariosa. Bajo ese envoltorio del fútbol de siderurgia de Jiménez, Vicente aparece sin avisar y sorprende con el detalle, tras nueve días, de pretemporada.

En el segundo acto, Fabio y Josemi portaron el timón en San Fernando. Ante el Combinado del Sur en Tunte, el pasado viernes, le tocó el turno a Cala y Fabio. El exjugador de Getafe, Granada y Sevilla es un remedio de urgencia, a pesar de que Jiménez recalcó que ha jugado "partidos de Champions" en esa demarcación de director de orquesta.

A la feroz competencia, hay que recordar que la secretaría técnica de Toni Otero trata de dar con el relevo natural de Roque Mesa. Desde su traspaso al Swansea -junio de 2017, y tras dejar 12,5 millones de euros en las arcas de la UD-, le falta calma y mando a la sala de máquinas. Sobre todo: personalidad.

La mejoría de Javi Castellano, a pesar del descenso, en el trágico 2017-18, fue evidente pero Jiménez sigue ensayando. Además, el futuro de Gaby Peñalba, lesionado desde febrero tras pasar por el quirófano, huele a rescisión. En este minuto de la fase preparatoria, estás más fuera que dentro. Se busca una solución urgente, y Aquilani -que no seguirá en este curso en el infierno de plata- ya mira a Italia. Jiménez añora un organizador eléctrico y un llegador. De tal manera, que se esfuma la figura del mediapunta. Bajo este panorama táctico Vicente sale beneficiado. Tras tocar la gloria con el 4-3-3 y 4-1-4-1 con Setién -cautivó a Del Bosque- el renacentista deja un golazo como carta de presentación.

Tiene ganas, talento y el aval de la experiencia. Superó una lesión tortuosa y un descenso que dejó sus lágrimas como foto icónica. Pero su futuro es un expediente 'X'. "Estoy más receptivo a dejar la UD si llega una oferta interesante". Lo que ha llegado,en julio, es un taconazo imponente. ¿Encaja Vicente?

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