El lavado de cara de la UD tras una temporada catastrófica es evidente. Tras una revolución en el mercado de invierno en busca de una salvación a toda costa, el mercado veraniego también ha visto cómo el equipo amarillo cambiaba la gran mayoría de cromos con el fin de olvidar aquel esperpento. Hasta 24 jugadores que formaron parte de la plantilla el pasado curso han tenido que buscar asilo futbolístico lejos del Archipiélago. Pero la temporada ha pasado factura a la mayoría y cuatro de ellos siguen sin equipo. Es el caso de Jonathan Calleri, Macedo, Alberto Aquilani y Emmanuel Emenike. Tampoco Paco Jémez ha hallado club. Además, tres jugadores no encontraron destino hasta la semana pasada (Aguirregaray al Al-Fateh de Arabia Saudí, Tannane al Utrecht holandés y Ezekiel al Kortrijk belga) mientras que Sergi Samper y Nacho Gil no cuentan para el Barcelona y el Valencia, respectivamente, que le buscan destino.
Rémy y Tannane abren la lista de bajas del pasado curso. Los dos salieron por decisión de Jémez. El ex del Chelsea marchó cedido al Getafe, donde no brilló. Al término de la temporada, la entidad intentó que continuara, pero el delantero francés marchó al Lille previo pago de 1,5 millones de euros.
El caso del marroquí fue diferente. Volvió a Francia para entrenarse con su club de origen ya que no podía jugar en otro club por la normativa FIFA. Pese a todo, el extremo encontró acomodo hace unos pocos días y firmó con el Utrecht, por lo que vuelve a la Eredivisie tres años después. A estas dos bajas de invierno se les suman la de Vitolo al Atlético, Jonathan Viera al Beijing Guoan, Hernán Santana al Sporting, Aythami al Córdoba, Borja Herrera al Valladolid (ahora en el Reus) y Mauricio Lemos al Sassuolo.
Caso aparte es el de Sergi Samper, quien tuvo que poner punto y final a su cesión en Gran Canaria debido a una lesión. Mala fortuna para el centrocampista catalán que, de momento, sigue en la disciplina del Barça, aunque buscando acomodo en otro sitio.
Solo queda un fichaje de Jémez
La renovación de la plantilla fue total en el mercado invernal. Pero tal y como vinieron, los fichajes de la era Jémez se fueron uno tras otro hasta tal punto de que solo queda Gabriel Peñalba. No obstante, al centrocampista argentino no se le ve en el verde desde que se lesionara contra el Sevilla el 17 de febrero y no tendrá ficha hasta enero por dicho contratiempo.
Junto al argentino vino de México el lateral Matías Aguirregaray. El uruguayo aterrizó cedido del Tijuana y, al término de la campaña, su equipo volvió a dejarlo ir al Al-Fateh. El destino del jugador es, sin duda, el más exótico de todos.
Para jugar en las bandas, la UD trajo a Nacho Gil y a Jairo. El primero sigue entrenando con el Valencia tras truncarse su salida al Córdoba. El segundo acabó su contrato con la UD y se fue libre al Hamburgo alemán, ahora en Segunda.
La pólvora la debían poner Emmanuel Emenike e Imoh Ezekiel. Si el paso del primero por el club pasará a la historia como un ridículo histórico, la participación del segundo fue más bien escasa. El primero sigue sin equipo y el segundo se acaba de marcha al Kortrijk de Bélgica. El tercer nigeriano que llegó sí fue un acierto. Tras su periodo de préstamo y un Mundial notable, el Figueirense portugués hizo caja con él al venderlo al Stoke City por 7,2 millones.
También convenció el central Alejandro Gálvez. El defensa, que expresó su deseo de seguir en la Isla, ha completado la pretemporada con el Eibar y su futuro es una incógnita. De momento está en Primera División, como Chichizola, Bigas y Ximo. El argentino firmó por tres temporadas en el Getafe, el segundo fue traspasado al Alavés, y el tercero marchó cedido al Eibar en la operación Christian Rivera.
También hace poco, el pasado 6 de agosto, Hernán Toledo estampó su firma con el Argentinos Juniors. Otro que ha salido de España, con un destino sorprendente, es Alen Halilovic, que se marchó al poderoso Milan previo pago de tres millones al Hamburgo.
Por último están los casos de Raúl Lizoain, David Simón y Borja Herrera, grancanarios que competirán contra los amarillos en Segunda División tras toda la vida en el club (como Hernán y Aythami). El portero se marchó al Alcorcón, el defensa al Deportivo y el lateral izquierdo al Reus, todos con la carta de libertad en busca de minutos.
Por tanto, quedan cuatro jugadores sin equipo: Jonathan Calleri, que negocia con el Alavés según informan desde Vitoria, así como Macedo, Emenike y Aquilani, que maneja ofertas de Italia.
