¿Ve lógica la presión del entorno en octubre? ¿Encara la cita ante el Almería con urgencia?
No lo veo así, acabamos de comenzar y estamos en el camino correcto. Llevamos 15 puntos y restan 34 jornadas. Queda un mundo. No es una final. Vamos con la intención de sumar los tres puntos como en todos los campos. Es un partido importante, pero no definitivo.
Dos partidos sin ganar. 196 minutos sin marcar. ¿Es un problema de puntería o de juego?
De lo segundo no creo, ante el Alcorcón tuvimos un 65% de posesión y ante el Málaga también dominamos [54%]. Hay fases en las que no tenemos el control total, pero somos protagonistas en la mayoría de las fases. Falta maldad arriba. Finalizar jugadas, meter el balón en el área; que es dónde pasan las cosas. Hay que ser más agresivos.
¿Se siente más cómodo solo en la medular o con Íñigo Galarreta y Mesa de escuderos?
Me siento bien como única referencia o en el doble pivote como en el último partido [con Galarreta]. Aunque no entré tanto en juego. El Alcorcón nos salía bien a la presión. Fue difícil. Tratamos de conectar con Tana, Maikel o el 'Chino', pero siempre veías dificultades. Hay que seguir en la misma línea de juego.
Usted transmite personalidad y tiene buen desplazamiento en largo. ¿No le gustaría tomar más decisiones en la sala de máquinas y sentirse más protagonista?
Si estoy solo tengo más libertad de movimientos y caigo a los costados para recibir. Con Galarreta nos tenemos que dividir y compenetrar en el campo. Por la derecha recibe él, a mí me toca la izquierda.
Se insiste que este equipo, al que han llegado 17 fichajes, está en fase de cocción. ¿Cuándo veremos la versión imperial?
Falta acople y hay que aclimatarse. Cuando nos encontremos y se vea el juego del míster, pues será todo más fluido. Llevamos ocho jornadas, tenemos quince puntos y estamos bien. No hay que alarmarse. La UD no ha perdido en casa. El ascenso está en el Gran Canaria. Aquí cosechamos dos empates y tenían que haber terminado en victoria.
¿Le preocupa que todos los rivales se atrincheren en su área?
Intentan meter dos líneas de cuatro y salir a la contra. No nos pueden pillar desorganizados. Si llevas la iniciativa, dejas espacios y se debe corregir. Cuando estamos atacando, las vigilancias deben ser correctas. Si perdemos un balón o fallamos un pase, que no nos pillen. Es normal que vengan a defenderse porque nuestro potencial es grande. Y se demuestra en el césped.
Con su fichaje y una adaptación récord de 41 días se acaba la maldición de Roque Mesa. Ya hay timonero. ¿Cómo lo ha hecho?
Desde el primer día tanto las profesionales del club como compañeros, me acogieron muy bien. Me facilitaron todo. Ya conocía a jugadores y nos intentamos ayudar como una familia. Es una de las razones. La insistencia de la UD provocó que estuviese aquí para que fichase [31 de agosto]. Sé que tengo que dar mucho. Me han dado confianza y han apostado fuerte. Tengo que devolvérselo en el campo. Todavía no me han visto. Me queda para llegar al 100% y ser más regular. En los cinco partidos que he jugado, hubo de todo. Quiero ser regular. No se ha visto al Timor que puedo demostrar. Pido que la gente tenga paciencia. Tanto conmigo como con todos los compañeros. Es preciso un pelín de confianza. Que la gente siga apoyándonos. Faltan un par de partidos para ver mi mejor versión.
Repetir una y otra vez que la UD tiene la mejor plantilla de Segunda, ¿no resulta perjudicial? ¿Cómo se maneja esa presión?
Podría jugar en tu contra porque te metes más presión. Pero Las Palmas es un gran club, encadenó tres años en Primera. Fueron a un muy buen nivel, restando el último. Puede ser un arma de doble filo y debes manejarla. A mí, me gusta esa presión, hay jugadores muy buenos. Hay que lograr el objetivo.
Usted suma 110 partidos en Segunda -subió con el Leganés-. Militó en el Girona, Valladolid y el conjunto pepinero. ¿Le recuerda este proyecto a otro que haya vivido en la categoría de plata con tanta presión y exigencia?
Me recuerda mucho al primer año del Valladolid. Era un recién descendido con 'plantillón': Óscar González, Jeffrén, Roger, Marc Valiente, Jesús Rueda, Rubio... Jugase quién jugase, con Rubí de entrenador, había un grupo de nivel. Tiene similitud con esta UD. El equipo estaba hecho para ascender. Nos eliminó precisamente Las Palmas en el playoff [semifinales en junio de 2015]. Teníamos esa presión.
¿Qué le diría a los que opinan que Jiménez es muy defensivo?
Que no es así, Jiménez demuestra que quiere ser dominador. Controla ataque y defensa. Entrena en base a la posesión para atacar y finalizar. Fuera de casa, sí hay que tener más cuidado. En Segunda, si no tienes equilibrio y mantienes la mayoría de los partidos la portería a cero, no ganas. Todo pasa por no encajar y con el potencial que tenemos; ganaremos. Alguna entrará. Lo primordial: portería a cero.
Araujo y Rubén es una dupla de lujo. ¿Alguna mejor?
El año pasado [Girona], Stuani y Portu firmaron buenos números. Con el 'Chino' jugué 25 minutos y fueron los mejores en ataque. Dará mucho si está enchufado. De Rubén no hay que descubrirlo, hablan sus números. Encantado de jugar con ellos en este gran equipo.
Usted firmó hasta 2022 y seducido por el proyecto. ¿Ha respondido la UD a sus expectativas?
Sí. Antes de venir, me informé. Llamé a compañeros y consulté a Juanpe. Lo que me llevó a dejar el Girona de Primera, y jugaba de titular con Eusebio, era la seriedad y la historia de Las Palmas. Me motiva pelear por ascender. Era un nuevo reto. La insistencia de Otero [secretario técnico], del presidente [Miguel Ángel Ramírez] y el míster [Jiménez] también jugaron un papel crucial. Nunca un equipo había insistido tanto por mí, ni había hecho un esfuerzo como el que se hizo.
¿La UD puede convertirse en un nuevo Girona y asentarse en Primera de forma eficiente?
Respetando al Girona, la UD tiene más historia. El cuadro catalán lleva dos temporadas en Primera y la UD, un ciclo mayor [34 cursos]. Por circunstancias se está en Segunda pero hay que demostrar, partido a partido, que se puede subir.
Jiménez es ambicioso. Sueña con el ascenso y jugar en Europa.
Paso a paso. Vengo para sumar y aportar mi granito de arena para volver a Primera. Vamos a Almería a por los tres puntos. No se asciende en octubre. Hay que compensar el esfuerzo de la UD por los fichajes.
