El crédito del costalero. 165 noches después del anuncio de la contratación de Jiménez -como embajador de la esperanza para huir de los tentáculos malignos de la ´era Emenike´-, el estratega del ciclo legionario de la UD afronta dos reválidas titánicas. 180 minutos para la reivindicación del nuevo dogma táctico o la catarsis. No se toleran más pasos en falso. El cuadro isleño ha dejado escapar 16 puntos en doce jornadas. Y dos derrotas, ante Elche y Granada, dejarían al ´rival a batir´ fuera de la zona de ascenso y al proyecto en una situación comprometida.
La dinámica negativa, un triunfo en las últimas seis jornadas -seis puntos cosechados de los 18 en litigio desde el 29 de septiembre-, obliga a Jiménez a iniciar una senda positiva. Se dispara la urgencia. Elche y Granada, dos combates señalados en rojo en el calendario del gigante isleño de los 19,2 ´kilos´ de tope salarial. Una cifra, la segunda más alta de la Liga, que persigue a una entidad obligada a sellar el ascenso. A cualquier precio.
El sábado (19.30 horas, TVC) llega la primera ´final´ ante el Elche en el estadio mundialista Martínez Valero -14ª fecha y a siete de alcanzar el ecuador-. Completa esta pasarela de tinieblas, el UD-Granada del viernes 16 de noviembre en Siete Palmas (20.00). La afición amarilla, tras el agónico desliz ante el Dépor -Duarte selló la igualada en el 94´ con 50 segundos-, pitó durante fases del encuentro el rendimiento de sus gladiadores. Los de Jiménez encadenan dos empates ante Mallorca y el club deportivista tras recibir dos goles en saques de esquina.
Se ha extraviado la contundencia defensiva (seis goles encajados en las últimas cuadro jornadas) y el empleo del tridente diabólico MAR -Mir, Araujo y Rubén- ha terminado por desestabilizar el patrón de juego de Jiménez. Con los tres mosqueteros de pólvora, se han sumado cinco de los últimos nueve puntos. Con el Moña como seria duda, hoy se determinará si llega al importante compromiso del sábado. Timor, Peñalba y Momo son baja. La meta es el ascenso directo. El Everest de la gloria aguarda en los ochenta puntos tras 42 jornadas. Si la UD pierde ante Elche y Granada, se quedaría con 20 unidades tras 14 duelos. Estaría obligada a sumar 60 puntos en las 28 jornadas restantes. Sería preciso escenificar un caminar despiadado durante los últimos seis meses y buscar veinte triunfos.
Discurso oficialista
Con el interrogante del central David García -hoy pasa la prueba definitiva sobre su lesión muscular en los isquiotibiales que se provocó ante el Mallorca-, la UD firma hoy el segundo ´entreno´ en Maspalomas. Ajenos a la crisis, los jugadores se aferran al dogma del músculo y el rigor. Y también al del frenesí del tridente que tumbó al Numancia.
"Ahora sí que solo vale ganar en Elche", determina De la Bella. Desde la zona noble del club isleño, se defiende a ultranza la figura de Manolo Jiménez y se apuesta por la resurrección en un campo talismán como el Martínez Valero -donde la UD logró el ascenso a la categoría de plata (1996)-. "La UD ganará en Elche; hay que tener tranquilidad y plena confianza", realzan.
Veredicto de la grada
El bloque isleño arrancó como una apisonadora y asaltó el liderato tras batir al Reus en la primera fecha (2-0). Los de Jiménez nunca han salido de los puestos de ascenso tras 12 jornadas. Cuatro fechas en puestos de ascenso directo y ocho en el playoff. El doble tropiezo, ante Elche y Granada, sacan a la UD de los puestos de privilegio. Y obligarían a completar una remontada de oro por los puestos de ascenso directo. El batacazo en Elche dejaría el bagaje de una victoria en siete contiendas. La afición demanda un torrente de gloria inmediata. Ración de estimulantes. Jiménez atesora valía. Pero el tiempo es implacable.
