Cuatro sesiones a puerta cerrada en 2019. Máximo hermetismo y una posición revolucionaria para Timor. Con Diego Parras en la plataforma de salida y el aterrizaje del central de la factoría Eric Curbelo como salvador, la UD de Paco Herrera afronta la primera final del año en tinieblas. El 1 de enero, en el Gran Canaria, los amarillos trabajaron con el candado puesto. Es la misma rutina para esta semana, salvo el sábado.

El lunes aguarda el modesto Rayo Majadahonda en el césped del Cerro del Espino. Será un congelador. Un recién ascendido con un tope salarial de cuatro millones (por los 19,2 del conjunto amarillo) ante un gigante en apuros. El bloque isleño solo ha sumado una victoria en las últimas trece jornadas de competición liguera. Con las bajas de Araujo y Javi Castellano, toca reaccionar o habrá que mirar a los ojos a un lobo llamado descenso. ¿Qué está preparando Paco Herrera?

Ayer, en el laboratorio teldense, con las probetas y bajo el manto experimental de un bolo, examen con sorpresas ante Las Palmas Atlético.

Bandas: Fidel Chaves y Sacko

En el ensayo, la UD de Herrera se midió al filial de Juan Manuel Rodríguez y formó con Raúl Fernández; Álvaro Lemos, David García Santana, 'Deivid', De la Bella; Gaby Peñalba, Kirian, Tana, Hadi Sacko, Fidel Chaves y Rubén Castro de inicio.

El Moña lució su olfato atómico y fue el mejor del ensayo ante los soldados de la categoría de bronce. Hoy, el plantel profesional vuelve a ejercitarse a puerta cerrada y el sábado será a puerta abierta en el Gran Canaria -10.30 horas-.

El 'bolo', que terminó (2-2), mostró otro boceto en el segundo acto, con este once: Nauzet Pérez; Eric Curbelo, Mantovani, Timor, Dani Castellano; Josemi, Galarreta, Maikel Mesa, Jerónimo Figueroa Momo; Rafa Mir y Tomás Pekhart.

Llama poderosamente la atención la presencia del centrocampista valenciano Timor de central. Rubén (2), Toni Segura y Adrián Socorro fueron los realizadores.

La presencia del centrocampista vasco Galarreta en la convocatoria es una incógnita. La primera estimación médica -de su fractura espiroidea del segundo metacarpiano de la mano izquierda- determinaba que no precisaba de tratamiento quirúrgico. Y el período de baja era de unas seis semanas. Este diagnóstico se hizo público el pasado 26 de diciembre. El regreso de Galarreta estaba previsto para el 4 de febrero, pero ayer completó el 'partidillo' con una protección en la mano.

En lo referente a Juan Cala, el zaguero encadena tres sesiones en la enfermería por unas molestias. Hoy afronta la cita decisiva para calibrar si viaja el domingo a Madrid.