Extremos con cianuro y un trivote de furia con el artista Galarreta. Paco Herrera encontró el Santo Grial. A la undécima y tras 94 días de búsqueda. El estratega de la UD, asesorado por su segundo Ángel Rodríguez, se rinde a los puñales Fidel y Blum en su orden táctico definitivo. Bajo el rótulo del 4-1-4-1, late el nuevo planeta táctico de un gigante que deja activos del calibre de Maikel Mesa en la grada. Velocidad, ritmo, precisión y talante vertical. A falta de 16 jornada, aquí la está la idea definitiva. Ante el Sporting, llegó el empujón definitivo. Era ganar o morir.
Es la primera ocasión que Herrera ubica a Fidel Chaves (derecha, a pierna cambiada) y a Blum por la izquierda (banda natural), con Gaby Peñalba de timonero. El tanto de Galarreta dio un triunfo merecido para los amarillos, que se quedan a cinco puntos del Oviedo -que marcha sexto y es la frontera con el playoff de ascenso-. Timor y Peñalba aportan rigor y furia, mientras que Galarreta hace de Jonathan Viera.
Contragolpe de libro
El 1-0 fue una obra de arte. Una acción de contragolpe de pizarra: potencia y desborde de Blum, gran control de Rubén Castro y la definición de Galarreta resultó sublime. El Moña y Timor malograron dos ocasiones clarísimas y Fidel, ya en la segunda parte, tuvo la enésima para golear y triturar al Sporting de Gijón.
Ese primer acto, elogiado y reconocido por el entorno, es el resultado a toda a una evolución. En el estreno de Herrera ante el Cádiz en el Carranza (4-1) se apostó por Mir y Araujo de interiores. Rubén ejerció de nueve, con Tana de enganche. Javi Castellano y David Timor fueron el doble pivote. El segundo duelo de Herrera (0-0) fue ante el Real Oviedo, el estratega catalán alineó a Javi Castellano, Timor y Mesa. Tana, Araujo y Rubén Castro completaron el frente ofensivo.
Ante el Lugo en el Anxo Carro, el entrenador sorprendió con Álvaro Lemos de extremo. Araujo jugó por la izquierda, con el Moña de nueve. En la medular: Ruiz de Galarreta, Timor y Mesa. En el derbi, ante el CD Tenerife (1-1), Fidel y Blum actuaron de extremos, con Rubén y Araujo en la delantera -giro al régimen táctico 4-4-2-. Ruiz de Galarreta y Timor se vistieron de arquitectos.
En el naufragio ante el Córdoba (4-1), la UD completó, a pesar del sonrojo, una de sus actuaciones más completas a nivel ofensivo -quince remates, seis a portería y seis saques de esquina-. Fidel y Blum repitieron de extremos, con Mir de delantero y Araujo, en la mediapunta. Galarreta y Timor asumieron la responsabilidad de la contención y creación. El pulso fue un ida y vuelta diabólico, que penalizó en exceso a la UD, que recibía 12 tantos en tres salidas en el diciembre negro.
El Roque de los 1,91 metros
Había que taponar la sangría y entra un actor clave: Gaby Peñalba. En este 2019, Las Palmas se mantiene invicta con el argentino de pivote defensivo. Desde la venta de Roque Mesa Quevedo -julio de 2017-, no se detectaba el despegue definitivo de un pivote. Samper, Aquilani, Peter Etebo...Tiros al aire hasta que llegó el canchero. Especialista en pequeños detalles y en cubrir su jardín. Es el nuevo emperador.
Ante el Rayo Majadahonda (0-0), Lemos y Mir fueron los extremos; con Peñalba, Timor y Galarreta en la medular. El francotirador: Rubén Castro. En el festival pirotécnico ante Osasuna (4-1) en el Gran Canaria: Peñalba, Timor, Galarreta encadenaron su segundo partido en la medular. Mir y Fidel en las bandas, con Rubén como única referencia ofensiva. El trivote 'G-T-G' -Gaby Peñalba, Timor y Galarreta- repitió ante Zaragoza y Sporting.
La expulsión del argentino ante el cuadro maño forzó la presencia de Javi Castellano en La Rosaleda. El gemelo voló de la titularidad a la grada ante el Sporting. Además, cabe reseñar que ante el Nàstic fue el turno de Mesa, Gaby y Timor (Galarreta estaba lesionado).
Fidel y Mir fueron los extremos en el Nou Estadi. En la vertiente ofensiva en La Rosaleda, regresó Blum al once tras casi dos meses de baja, con Mir por la derecha. El Moña fue el nueve de la legión amarilla. La controvertida expulsión de Deivid fue un artefacto macabro.
Con el alta médica de Blum, y el rendimiento sideral de Fidel Chaves en el Gran Canaria, Herrera ya tiene a sus extremos. El trivote no se toca, y por ahora, en la lucha del 'nueve' gana Rubén Castro por goleada a Sergio Araujo.
El pasado domingo la grada demandó la presencia del 'Chino' en ese minuto 71 de reproches al arquitecto amarillo -la entrada de Momo por Fidel no fue digerida por el respetable-. A los pocos segundos, entró el Chino por Timor.
En defensa del estilete, bailan sus diez tantos y dos asistencias. Padece la soledad de un genio que lanza desmarques y carece de respaldo. Cuatro jornadas después, la UD festeja un triunfo y Herrera tiene la fórmula de la Coca Cola. La ecuación del Ferrari legionario se despeja con extremos. El sacrificado es Mir. Araujo pide paso y aguarda el Alcorcón. Hay que poner la directa. 94 días y un grito: ¡Eureka!
