Si ya era delicada la situación en la que Pepe Mel se hizo cargo de la UD Las Palmas, alejado del propósito que se marcó al inicio de la campaña, la historia se recrudece para la visita del conjunto amarillo a Granada (mañana, 19.00 horas, Televisión Canaria). Las bajas que acumula el cuadro amarillo para el duelo de Los Cármenes, trascendental si quiere apurar sus opciones de hacer algo notorio de aquí al final del curso, enredan el once y la convocatoria del preparador del equipo grancanario. La pizarra del técnico se agita.

Ante esta tesitura el entrenador madrileño se verá obligado a agudizar su ingenio. Las ausencias ni son pocas -cinco- ni son imperceptibles. Por lesión no estarán ni Sergio Araujo -con dos meses como mínimo de baja por delante- ni Danny Blum -caído en el último partido frente al Mallorca-; por sanción se quedan en tierra Álvaro Lemos y Fidel Chaves -ambos cumplen ciclo de amonestaciones-; y convocado con España sub 21 anda Rafa Mir. Cinco bajas notorias para un equipo lastimado de nuevo después del golpe de realidad que se llevó la semana pasada en el Estadio de Gran Canaria, con su primer tropiezo como local.

La convocatoria que presente hoy Pepe Mel -el equipo se ejercitará a primera hora de la mañana antes de poner rumbo a Granada- está más que condicionada. Las bandas se estremecen y la punta del ataque queda en manos de dos hombres: Rubén Castro y Tomás Pekhart. Todo con la variante de Maikel Mesa, que apunta a titular en el choque frente al equipo nazarí, como apoyo a Castro, el máximo goleador de esta UD con 11 goles. La pegada del futbolista tinerfeño está sobre la mesa. Capaz de pisar área desde el centro del campo o como segunda punta, su camiseta lleva grabada hasta el momento cuatro goles en esta temporada (tres en LaLiga 1|2|3 y otro en la Copa del Rey). Esos números le sirven al lagunero para ser el tercer máximo artillero de la UD en este curso.

La margarita del central

La lista de hombres disponible sale sola: 18 jugadores. Sin embargo, el exceso de centrales (Cala, David García, Deivid y Aythami) y de centrocampistas (Javi Castellano, Timor, Galarreta y Peñalba) rebota contra la lógica. La pasada semana fue Juan Cala el que se quedó en la grada. El central sevillano, fijo para Manolo Jiménez y Paco Herrera, no estuvo en Riazor por sanción y Mel apostó por la pareja que le dio un triunfo revitalizante a la UD: Aythami Artiles-David García. Los incombustibles zagueros rayaron a buen nivel frente al Dépor, pero se resintieron frente al Mallorca. El tándem peligra. En la medular, el gemelo Javi Castellano tampoco ha entrado en una convocatoria desde que Mel se sienta en la banda.

Uno de los problemas principales que tendrá que solventar Pepe Mel está en las bandas. En sus dos partidos al frente del equipo Momo ha sido titular. El otro volante con el que cuenta Mel es el serbio Slavoljub Srnic, que solo ha disputado 11 minutos en LaLiga 1|2|3 desde su llegada en el mercado invernal.

El futbolista procedente del Estrella Roja de Belgrado -disputó la Champions League esta temporada con el mítico club serbio- ha sido intrascendente desde que aterrizó en Gran Canaria. Ahora tiene ante sí una oportunidad de demostrar su valía sobre el césped y convencer a Mel de que es útil en este ultimísimo tren en busca de la promoción de ascenso.

Esa tesitura ha obligado a Pepe Mel a rebuscar en el filial, que no anda precisamente en su mejor momento. Entre esos futbolistas de la factoría de Juan Manuel Rodríguez en el Anexo, el preparador amarillo escogió a Toni Segura y Cristian Cedrés. Ambos han completado la semana con el primer equipo y Mel piensa en ellos como una opción real para saltar al césped de Los Cármenes. Otra alternativa con la que cubrir esas vacantes está en adelantar a Dani Castellano -otro inédito en la etapa Mel - para subsanar la fuga que tiene la UD en las alas.