El congresista del vivero.Talento bajo la dictadura de la gran depresión. Pepe Mel I, el osado. Al filo del abismo, a seis puntos del infierno y ante la visita del Lugo de Eloy Jiménez, el estratega madrileño deja su voto en la urna. Morir por la nueva era. Desde las 17.00 horas en el estadio de Gran Canaria (LaLiga 1|2|3 TV), la UD afronta uno de los duelos más importantes de este siglo. Está en juego dejar a los gallegos -que marcan el descenso- a nueve puntos, cuando restarían 18 en juego. Con el derbi ante el Tenerife en el horizonte (sábado 4 de mayo, en el Heliodoro Rodríguez López), solo vale ganar. Una cuestión vital.

El meta Josep Martínez y el extremo Cristian Cedrés conforman la última locura de Mel. Vírgenes en el planeta profesional y útiles para encarrilar la permanencia. El mal menor tras invertir 19,2 millones de euros. El guardameta valenciano de 20 años se postula titular tras la calamitosa actuación de Nauzet Pérez en el Carlos Belmonte -cuatro goles encajados tras cinco tiros-. "Lo tengo decidido desde Albacete", aseguró el entrenador amarillo. Desde la inocencia de un Josep incontestable con el filial en Segunda B, se rearma un bloque sediento de éxtasis. Vuelven Araujo, el eterno David García, Blum y Maikel Mesa.

En la relación de los descartados, Deivid, Srnic, Pekhart y Dani CastellanoAyer se sumó el último contratiempo de Toni Segura. El atacante era el tercer ingrediente del filial en una convocatoria de récord. Se pierde la final del siglo por una gripe. El alemán Blum ocupa su sitio.

En esta lista de diamantes y veteranos bajo sospecha, no hay margen para el despiste. Mel encadena tres derrotas en el fortín de Siete Palmas. El partenón se ha convertido en un psiquiátrico. El público, más allá del cabreo, juego un papel fundamental. Su aliento es el primer paso para evitar un desplome histórico. 49 días sin ganar, un triunfo en siete jornadas... Mel precisa del beneficio de la duda. Su dogma revolucionario mereció mejor fortuna ante Oviedo y Granada lejos de la Isla, así como ante el RCD Mallorca en Siete Palmas. Es el momento de dar el golpe de gracia a un Lugo que solo suma dos victorias foráneas (ante el Real Zaragoza y Córdoba).

Álvaro Lemos, Eric Curbelo, Aytami Artiles y De la Bella tratarán de congelar a Cristian Herrera. El estilete grancanario está cuajando una campaña sobresaliente en el Lugo con ocho tantos. Le hizo dos a la UD en el Anxo Carro en diciembre en 25'.Forjado en los filiales amarillos, hizo carrera en el Elche -Escribá le hizo debutar en Primera-,Almería, Girona y el modesto bloque lucense. En la medular de Mel, Timor y Galarreta son intocables. Prima buscar potencia y velocidad en los costados con Cedrés, Fidel y Blum. Rubén Castro y Sergio Araujo, que no juega desde Riazor (10 de marzo), encañonan al meta Juan Carlos.

La última victoria de la UD en el Gran Canaria se remonta al 17 de febrero ante el Sporting. Herrera portaba el timón. Han pasado 70 días de tinieblas.Un drama.

Del agujero de la portería al grado de precisión de los francotiradores. Esta UD tiene fisuras kilométricas. Ha recibido siete dianas en los últimos 95'. Solo Rubén Castro (12 tantos, tres asistencias) se salva de la quema. Araujo no marca desde el 16 de diciembre ante el Tenerife. Se precisa su espíritu vengador para triturar el drama. Escapar de la pesadilla.

Icono del Insular y enemigo

Eloy, héroe amarillo con dos ascensos (1996 y 2000), se cruza bajo la desdicha de un curso trágico. Pero una victoria lo cura todo. Terapia milagrosa. El novelista Mel lo sabe y frota la lámpara mágica de la factoría. La de Valerón y Viera. Tres triunfos en este 2019 es un bagaje paupérrimo.Escapar de las llamas de la gran depresión y generar patrimonio. La tarde de Josep y Cedrés. Noventa minutos y la sombra de la Segunda B.