Miguel Ángel Ramírez volvió a tomar la palabra en la semana del derbi. Al igual que lo hiciera en la primera vuelta, el presidente de la UD Las Palmas alzó la voz para dejar más o menos claro, entre otras cosas, que Pepe Mel será el entrenador la próxima temporada, que habrá bajas en todos los estamentos del club, incluida la plantilla, o que a partir de ahora recuperará el poder de decisión que, según él, delegó hace tres años. Y también que él no tiene la culpa de ninguno de los males del equipo.

"Este año voy a elegir más. De hace tres años hacia acá dejé de elegir tanto y ahora voy a volver a ser el que elegía antes. Creo que tengo un buen equipo de colaboradores que conoce perfectamente esta profesión y yo creo que entre todos vamos a poder tomar decisiones importantes", sentenció el máximo mandatario amarillo. En ese sentido, lamentó no haber fichado en junio de 2018 al madrileño. "Con Pepe Mel ya nos reunimos el verano pasado. Él era el entrenador que yo quería para esta temporada, pero se decidió fichar a otro. ¿Ves? No tomaba yo las decisiones (se ríe)", comentó en los medios oficiales.

Así que ahora que lo tiene no quiere dejarlo escapar. Todo fueron buenas palabras para el actual inquilino del banquillo. "Pepe ya lo ha dejado claro. El míster ha dicho que quiere continuar. Nosotros estamos encantados con él y estamos en ese proceso (...). Hay muchísimas posibilidades. Creo que es el hombre que nosotros necesitamos (...)", dijo Ramírez.

Objetivo menos ambicioso

Y añadió para argumentar su decisión: "Pepe le está dando otro aire al equipo. Tiene claro que quiere apostar por jugadores del filial -de aquí a que acabe la temporada yo creo que debutarán dos o tres jugadores más, porque estamos trabajando para el próximo año- y yo creo que Pepe reúne todas las condiciones que nosotros entendemos que debe tener nuestro entrenador. Ahora, es un entrenador de un caché, importante en la categoría, y también depende bastante de cómo movamos nuestro presupuesto, pero nos encantaría que estuviese la próxima temporada con nosotros", deseó.

Ramírez, por tanto, habló de futuro. Con la permanencia casi asegurada y el objetivo del ascenso dilapidado desde hace semanas, trabaja ya de cara la curso que viene, en el que la meta, al contrario que en la campaña vigente, será menos atrevida. "El objetivo es el mismo que el de este año: ir a por la permanencia. Una vez que consigamos la permanencia, intentar meternos en el playoff, y una vez nos metamos en playoff, intentar meternos en el ascenso directo. Pero sin urgencias (...). No sé por qué hay muchas urgencias y muchas prisas, aseguró el presidente, que echó a Manolo Jiménez en noviembre cuando tenía al equipo metido en los puestos de promoción, porque el objetivo, según él mismo manifestó, era estar entre los dos primeros.

Bajas en la plantilla

En cualquier caso, el dirigente opinó que la UD no ha tenido "un problema de entrenadores". "Manolo Jiménez, Paco Herrera y Pepe Mel son grandes entrenadores de la categoría, pero quizás el fallo fue no detectar las carencias de la plantilla que se diseñó en verano", agregó. En el mismo sentido, adelantó que habrá cambios en la nómina de jugadores. "Un porcentaje importante tiene contrato para la próxima temporada, pero bueno, tenemos jugadores de una gran valía y algunos se quedarán y otros saldrán", señaló.

Y dejó claro que habrá rescisiones de contrato no sólo en el plantel. "Va a haber bajas en todos los estamentos de la entidad. La UD Las Palmas no puede mantener la estructura que tiene esta temporada, por lo tanto, habrá reducción de plantilla en todo el club (...). La UD no es sostenible el año que viene. Tenemos una estructura de Primera División", recordó.

En otro orden de cosas, confirmó que las nuevas instalaciones de Barranco Seco estarán disponibles a partir de la próxima pretemporada, resaltó que para tener un equipo femenino la UD debe estar en Primera e insistió en que es necesario construir una nueva Grada Naciente en el Gran Canaria. Y sobre Aythami y Deivid, dos jugadores que trajo él, sentenció: "Esto no es una asamblea: alguien toma unas decisiones a pesar de que no gusten" .