Josep Martínez es uno de los objetivos del Real Madrid para reforzar su filial, el Castilla, de cara a la próxima temporada. Su interés no surge a raíz de la irrupción del portero de la UD, sino que viene de lejos. El club blanco considera que el catalán, incluido en la lista de los 55 mejores futbolistas jóvenes de España -un Draft elaborado por diferentes técnicos y seleccionadores de la Federación-, tiene una gran proyección y un futuro prometedor a nivel profesional.
El vigente tricampeón de Europa ya ha preguntado al entorno del jugador por la situación contractual del guardameta y, por ahora, todo ha quedado ahí, pero volverá a la carga. Josep, por su parte, estaría dispuesto a marcharse ante la llamada de una de las entidades más poderosas del mundo, sin embargo, la nueva situación que se le ha abierto en la UD le ha hecho replantearse la situación siempre y cuando cambien una serie de condiciones.
El meta de 21 años, al que le queda un año más de contrato con la UD, le gustaría ampliar su vínculo con el club isleño, pero a cambio de formar parte de la primera plantilla y adquirir más protagonismo. Cabe recordar que Nauzet Pérez, que llegó el pasado verano, dejará de pertenecer a Las Palmas el próximo 30 de junio salvo que renueve, algo que es muy improbable.
Cambios en la portería blanca
La baja del grancanario despejaría el camino al valenciano, que incluso podría convertirse en el portero titular si el club decide vender a Raúl Fernández, uno de los jugadores con más caché y valor en el mercado.
El Real Madrid, de su lado, prevé desprenderse a final de curso de Keylor Navas, por lo que Courtois quedaría como el primer portero del cuadro de Zinédine Zidane, cuyo hijo, Luca, pasaría a ser el segundo. La idea con el ucraniano Lubnin, que también pertenece a la disciplina blanca, es que vuelva a salir cedido a otro equipo y fichar para el Castilla, que se encuentra en plena lucha por clasificarse para la promoción de ascenso a Segunda, a Josep.
La piedra, ahora, esta en mano de la UD, que deberá decidir si quiere ampliarle el contrato en próximamente o si prefiere venderle, toda vez que a partir del 1 de enero de 2020 sería libre para negociar con cualquier otro equipo. En sólo dos partidos como titular ha demostrado que es válido. Al club le toca elegir.
