Lejos quedaron los tiempos en los que la UD Las Palmas no necesitaba vender, pero ahora, con la reducción drástica del presupuesto y del tope salarial que vivirá la próxima temporada (2019-20) por no haber conseguido su ascenso, que era su objetivo principal, le obliga a soltar lastre económico para que le cuadren las cuentas.

Es por ello por lo que el club amarillo considera transferibles a todos los futbolistas de la plantilla, por los que escuchará ofertas en el caso de que las reciban. Incluso, la propia entidad también coloca a algunos de ellos en el mercado, como en el caso de Álvaro Lemos, por el que quiere sacar tajada.

El hecho de que la mayoría de los jugadores que integran el plantel tenga contrato en vigor no es un motivo para su continuidad: Las Palmas necesita traspasar o al menos ceder a un buen número de ellos para poder competir el curso que viene.

Cabe recordar que los únicos que terminan contrato de los que todavía militan en la UD -Rafa Mir y Dani Blum ya se fueron- son David García, Momo y Peñalba. Además, a los miembros actuales hay que sumar a los que regresan de cesión en otros equipos: Mateo García, Cristian Rivera, Mauricio Lemos, Martín Mantovani y Benito Ramírez, aunque el club ya tiene encaminadas las salidas de los dos primeros.

En cualquier caso, Las Palmas está obligada a desprenderse de muchos de sus jugadores porque no puede mantenerlos. La nueva apuesta girará en torno a los futbolistas de la cantera, como suele ser habitual en casos de ajuste económico como el que vive el club isleño. Pero lo primero son las salidas y cualquiera puede hacer las maletas.