Juan Cala se marcha de la UD Las Palmas. Lo anunció, para sorpresa de todos, incluida la del propio futbolista, el presidente Miguel Ángel Ramírez durante su comparecencia ante los medios. El sevillano es uno de los cuatro jugadores mejor pagados de la plantilla y, al mismo tiempo, de los que más cartel tiene en el mercado; una combinación perfecta para que su salida fuera considerada una vía perfecta de ahorro en el nuevo contexto del club isleño.

El central, que firmó el verano pasado un contrato por tres temporadas, ya es historia de la UD, que tiene previsto comunicar la rescisión este mediodía. "La decisión de rescindir es porque hay una oportunidad de que se vaya a un equipo y que a la UD no le cueste un euro. Puede costarnos -su salida- dinero, aplazado en un tiempo, o puede no costarnos un euro si cristaliza una opción en la que estamos trabajando", explicó el máximo mandatario.

"Es un tema de oportunidades económicas que se le presentan al futbolista y que nos puede hacer rebajar considerablemente la estructura salarial", añadió en el mismo sentido. La baja del central sevillano, de 29 años, es la cuarta desde el final de la competición, tras las de Nauzet Pérez, Gaby Peñalba y Fidel Chaves, además de Rafa Mir y Danny Blum, que estaban cedidos.

A la espera

Esa opción que implicaría la marcha de Cala a coste cero para la entidad amarilla la protagoniza el Getafe, equipo en el que el futbolista ya militó durante dos cursos y medio (2015-enero de 2018) antes de irse a China para luego recalar en la UD. Sin embargo, su regreso al cuadro capitalino no es sencillo, porque para que suceda, primero tiene que producirse alguna baja en el centro de la defensa azulona.

En cualquier caso, tanto Ángel Torres, presidente del Getafe, como José Bordalás, su entrenador, verían con buenos ojos la vuelta de uno de los puntales del equipo que subió a Primera División tras eliminar al Tenerife en la final de la promoción de ascenso en la campaña 2016-17.

De hecho, el de Lebrija ya estuvo cerca de marcharse al Geta durante el pasado mercado invernal, pero la operación finalmente no llegó a buen puerto porque no se produjo un condicionante clave para que acabara de concretarse.

Sin embargo, esa opción no es la única para Juan Cala, sino que tiene, como mínimo, otras tres de equipos de Segunda División interesados en hacerse con los servicios de un central de su experiencia. Esos clubes son el Málaga, el Zaragoza y el Cádiz, que contactaron con el entorno del jugador nada más enterarse por medio de Ramírez de que no continuaría en la UD.

En el caso de que el andaluz terminará en última instancia en un conjunto de la categoría de plata, la rescisión de su contrato costaría dinero a Las Palmas porque ninguno podría hacer frente a la ficha del jugador. Entonces, la entidad amarilla tendría que abonar parte de sus emolumentos mediante pagos divididos en diferentes plazos y quedarán recogidos en el acuerdo de rescisión que prevén firmar hoy.

Cala se marcha de la UD después de disputar un total de 30 partidos con la camiseta amarilla, en los que marcó un gol, de cabeza frente al Lugo en el Anxo Carro. Fichado a petición de Manolo Jiménez, fue un fijo para el primer técnico del curso y para también para el segundo, Paco Herrera, pero no tanto par Pepe Mel. Se marcha, además, el elegido como tercer capitán.