El lamento y la denuncia de Deivid. David Rodríguez, central de la UD, y cuyo contrato se extingue en junio de 2021, cuestionó el trato recibido por parte de la prensa en esta última campaña de amarillo -solo pudo completar diez partidos por las lesiones y el último fue ante el Cádiz el pasado 14 de abril cuando fue retirado en el descanso por Mel por una cuestión técnica-. "El primero que esperaba más de mí era yo; pero me gustaría que se le juzgase a todo el mundo como se me juzga a mí. Hay que ser autocrítico, hice malos partidos. Cuando hice partidos buenos, no escuché que se hablase bien (...) Silencio cuando lo hago bien, mientras a otros se les relanza. De mí ni se comenta nada cuando estoy a un buen nivel. Es la realidad, por ser quién soy se me juzga de manera diferente. Lo tenía claro, no esperaba que cierta parte de ustedes me tratase de esa manera. Lo asumo, lo respeto pero no lo comparto", aseguró en los micrófonos de la Cadena SER.

Ahondó en su crítica y añadió que no olvida "que se me tratase como un exfutbolista". "Hice partidos en los que no estuve a la altura, de ahí a tratarme como un exfutbolista. Va un mundo, hice partidos en los que estuve bien, tras dos meses sin jugar, jugué a un buen nivel. Este año no se me ha tratado de la misma manera que al resto". Se le cuestionó si era por el vínculo familiar. "Dímelo tú...Un error mío se magnifica por diez, el resto no; lo sé yo y ustedes. Pero doy la cara y hablo claro".

Con 93 duelos de amarillo, Deivid llegó el pasado julio tras lograr el ascenso con el Real Valladolid. Su fichaje se vio envuelto en la polémica, por su marcha al Córdoba en junio de 2014 -tras el Cordobazo-. "Cuando fallas el primer pase ya se escucha el runrún. Nunca me había pasado en mi carrera. Cuando he estado en los sitios me he sentido querido (...) Aquí tuve una presión extra.Se nota, a nivel personal, han pasado cosas que no te ayudan. Fue un año jodido. Desde los 18 años llevo jugando en el fútbol profesional y sé cómo va esto. Muchos firmarían una temporada mala en toda su carrera. Con 30 años, me queda cuerda para rato, aunque muchos me quieran retirar o me traten de exfutbolistas. Me toca mejorar y prepararme. Demostrar el nivel que tengo".

Para Deivid, tan malo no debe ser si "el curso pasado subí con el Valladolid. De los primeros 25 partidos jugué 23. Tengo dos años más de contrato, mi idea es volver a mi nivel. Tengo que hacerme fuerte, tengo mi familia aquí. Le puedo dar la vuelta a la situación. Desde el primer día de vacaciones estoy entrenando. En la pasada pretemporada, no pude empezar al nivel del resto". Y asegura que "con 30 años nadie conseguirá retirarme. Espero volver a mi nivel y que la gente se olvide de mí".

Desveló su última conversación con Mel. "Comprendió mi situación, me pasó todo lo que me pasó con él...Hablé con él, estamos en la misma línea. Me dijo 'entrena y cuídate'. Receta ahora "ordenar ideas" y confía en volver a ilusionar a la grada. "Los que tenemos que ilusionar a la gente somos nosotros, vienen quemados. Pero por parte de ustedes me gustaría que se juzgase a todo el mundo por igual. Me gustaría que la misma caña que se le mete a algunos, pues se les metiese a todos".

La culpa siempre de Aythami y Deivid

Mantiene su línea argumental exceso de celo y crítica por parte de un sector de la prensa. E incluye a Aythami Artiles, otro de los señalados por la grada. "Cuando jugamos Aythami y yo, somos los culpables. Hay 200 compañeros más, 1.000 cosas más y siempre se le mete la misma caña a los mismos. No hemos estado bien, parece que la culpa es siempre de los mismos. La afición es soberana, gente como tú, como nos tratan así, es lo populista".

Finaliza el zaguero puntualizando que "se puede criticar, es vuestro trabajo. Pero resulta populista meterle caña a Deivid. Un error mío queda de puta madre".