Las Palmas Atlético, que la próxima temporada iniciará su tercer curso seguido en Segunda B, continuará disputando sus partidos de Liga en el Anexo al Estadio de Gran Canaria, a pesar de que la idea era que lo hiciera en las nuevas instalaciones de Barranco Seco, que se presentarán al público el lunes 8 de julio, día en que arranca la pretemporada del primer equipo.

El motivo es que la grada del campo donde el filial amarillo tiene previsto jugar sus partidos en el nuevo recinto todavía no está acondicionada para la disputa de encuentros, por lo que el cuadro que dirige Juan Manuel Rodríguez se ve obligado a seguir en Siete Palmas.

Lo mismo ocurre con el resto de equipos de la cantera de la UD Las Palmas, que tendrán que jugar igualmente sus partidos de competición oficial en el Anexo. Lo que cambia con respecto al curso pasado es el lugar de los entrenamientos, que sí serán en Barranco Seco, que cuenta tras la reforma con tres campos.

Así pues, Las Palmas Atlético continuará en la casa en la que consiguió, por ejemplo, el ascenso a Segunda B y la permanencia las dos últimas temporadas, lo que implica que también que deberá jugar sobre un césped maltrecho y anticuado.

Han sido muchas las quejas formuladas a lo largo de los últimos años tanto por los técnicos como por los jugadores, locales y visitantes, que sufrieron la mala calidad del terreno de juego, lo que propició en muchos casos que hubiera lesiones, algunas de ellas grave.

Con el nuevo campo de Barranco Seco eso quedará atrás, sin embargo, el estreno deberá esperar porque la grada no está terminada y, por lo tanto, tampoco está adaptada a la condiciones de seguridad impuestas por la normativa vigente.

Es por ello, en definitiva, por lo que Las Palmas Atlético entrenará en las instalaciones que se estrenarán la próxima semana, pero jugará donde lo hacía antes.